Por David Morgan
WASHINGTON (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, autorizó el jueves que se llame a reservistas militares para colaborar en la lucha contra el ébola en África Occidental, mientras legisladores criticaron con dureza la gestión de su Gobierno para contener el brote de la enfermedad en el país.
La decisión de Obama se produjo después de que congresistas llevaran a cabo una audiencia respecto a la respuesta federal a la crisis desatada por el virus.
Obama firmó la orden ejecutiva que autoriza el uso de reservistas para ayudar en los esfuerzos humanitarios en esos países, aunque la misma no especifica el número de efectivos que estarán implicados en la operación.
La audiencia legislativa del jueves se produjo mientras se intensifican los temores por el brote después de que dos enfermeras que cuidaron del paciente liberiano Eric Duncan contrajeran el virus.
Tras la audiencia, la Casa Blanca dijo que Obama se reunió con los responsables que manejan la respuesta del Gobierno al ébola.
Más tarde el jueves, Obama dijo a periodistas que está considerando nombrar a un responsable encargado de liderar la coordinación de la respuesta del país a la enfermedad.
El mandatario dijo que en algún punto "podría ser apropiado" poner a una persona a cargo. Varios legisladores habían instado a que el Gobierno tomara esa decisión.
En medio de las críticas respecto a lo que se percibe como errores del Gobierno, muchos miembros de la Cámara de Representantes pidieron que se prohíba el ingreso al país de ciudadanos de las naciones africanas que han sido más golpeadas por el ébola: Liberia, Sierra Leona y Guinea.
Respecto a esta petición, Obama dijo que los expertos le dijeron que "una prohibición de viaje no es la solución" porque las actuales medidas de control están funcionando.
Obama dijo que no tiene una objeción filosófica a una prohibición de viaje pero destacó que mucha gente podría tratar de ingresar a Estados Unidos eludiendo los controles, lo que podría generar más casos de ébola y no menos.
Desde el estallido del brote en marzo, unas 4.500 personas murieron como consecuencia de la enfermedad.
El virus del ébola, que causa fiebre, vómitos y diarrea, se contagia a través del contacto de fluidos corporales como la sangre y la saliva.
(Traducido por la Mesa de Santiago de Chile; Edición de Emma Pinedo)