Por Jeff Mason
WASHINGTON, 4 abril (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró el sábado a que el nuevo acuerdo marco con Irán sobre su capacidad nuclear era un "buen acuerdo", y buscó apoyo para un pacto al que muchos en el Congreso se oponen.
Un día después de pedir su respaldo a los parlamentarios estadounidenses, Obama insistió en que el acuerdo impediría desarrollar armas nucleares al viejo rival de su país.
"Es un buen acuerdo, un acuerdo que cumple nuestros objetivos primarios, incluyendo estrictas limitaciones en el programa de Irán y cortando cualquier forma mediante la cual puedan desarrollar armas nucleares", dijo Obama en su discurso semanal, retransmitido por radio e internet el sábado.
"El pacto le niega a Irán el plutonio necesario para fabricar la bomba. Impide que la desarrollen con uranio enriquecido", dijo.
La Casa Blanca espera que el apoyo popular por el éxito en las negociaciones ayude a convencer a unos parlamentarios escépticos. Los altos cargos de la administración y la presidencia se encontrarán con un difícil trabajo propagandístico en las siguientes semanas y meses.
Obama habló en privado el viernes por la tarde con varias personalidades prominentes de la política norteamericana, como el portavoz republicano de la Cámara de Representantes John Boehner, la líder demócrata Nancy Pelosi, el representante de la mayoría republicana en el Senado Mitch McConnell y el líder demócrata en el Senado, Harry Reid, dijo la Casa Blanca.
En su discurso, el presidente insistió en que el acuerdo garantizaba unas inspecciones regulares a Irán y transparencia durante muchos años.
"Es un acuerdo a largo plazo, con límites estrictos en el programa iraní durante más de una década y medidas de transparencia sin precedentes que durarán 20 años o más", dijo.
El pacto marco, que fue confirmado el jueves después de ocho días de negociaciones entre Irán y seis potencias mundiales en Suiza, despeja el camino para un acuerdo final que tranquilice los temores de los países occidentales respecto a las posibles intenciones de la república islámica de fabricar una bomba atómica. A cambio, podría suponer el fin de las sanciones contra el gobierno de Teherán.
Los negociadores intentarán concluir el acuerdo para finales de junio. Obama señaló que el pacto aún podía romperse.
"El éxito no está garantizado", dijo. "Pero tenemos una oportunidad histórica de impedir el desarrollo de armas nucleares en Irán, y de hacerlo pacíficamente, con la comunidad internacional apoyándonos firmemente", dijo.