Por Gernot Heller y Doina Chiacu
TEHERÁN/WASHINGTON (Reuters) - El Gobierno del presidente Barack Obama envió el domingo al Congreso el acuerdo nuclear con Irán, mientras que el primer ministro de Israel llamó a los legisladores estadounidenses a rechazar el pacto que, dijo, sólo alimentaría a una "máquina del terror iraní".
En una primera señal concreta de la determinación europea para reconstruir rápidamente sus vínculos económicos y políticos con Irán tras la disputa de 12 años, el ministro de Economía de Alemania, Sigmar Gabriel, llegó a Teherán junto a una delegación económica y se prevé que otras potencias europeas hagan lo propio.
Obama prometió que ejercerá su veto si el Congreso rechaza el acuerdo, que limita al programa nuclear de Teherán al tiempo que permite un alivio a sanciones económicas contra la República Islámica.
La anulación del veto de Obama requeriría de una mayoría de dos tercios tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado, de modo que el Gobierno cuenta con ganar el favor de suficientes demócratas para contrarrestar a la fuerte oposición republicana.
"Creo que lo correcto es simplemente no aprobar el acuerdo", declaró Netanyahu en el programa "Face de Nation" de CBS.
"Hay muchas cosas por hacer para detener la agresión de Irán y este acuerdo no es una de ellas", agregó, mientras continuaba con una serie de entrevistas en medios estadounidenses para denunciar el pacto alcanzado el martes entre Irán y seis potencias mundiales.
RECONOCIMIENTO DE ISRAEL POR PARTE DE IRÁN
Teherán niega las acusaciones de Israel y Occidente de que estuviera usando un programa de investigación para encubrir ambiciones para desarrollar armas atómicas.
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, dijo el sábado que esperaba que el acuerdo llevara a relaciones más estrechas con los vecinos de Teherán en el Golfo Pérsico, aunque el líder supremo, el ayatolá Ali Khamenei, afirmó que Irán sigue enemistado con Occidente.
Netanyahu se valió de esos comentarios al hablar ante su gabinete el domingo.
"Los iraníes ni siquiera esconden el hecho de que aprovecharán los cientos de miles de millones que recibirán por el acuerdo para armar a su máquina del terror", declaró.
"Y dicen explícitamente que continuarán con su lucha contra Estados Unidos y sus aliados, Israel, por supuesto, sobre todos los demás", añadió.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, llegaría a Jerusalén el domingo por la noche, en un intento por mitigar la ira israelí por un acuerdo que, según el Estado judío, sólo puede aplazar las ambiciones de Irán de convertirse en un Estado nuclear.
Carter también visitará Jordania y Arabia Saudita, pues ambos países contemplan con suspicacias las posibilidades de aumentar la influencia de Irán en la región.
Sigmar Gabriel, que se reunirá con Rouhani y varios de sus ministros, dijo al diario alemán Bild que usará su viaje de tres días para sugerir que Alemania podría servir como mediador entre Irán y su archienemigo Israel.
También afirmó que insistirá en que el Gobierno iraní reconozca el derecho de Israel a existir.
Los que se oponen al acuerdo argumentan que no contempla una supervisión adecuada del programa nuclear de Irán.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, que encabezó la delegación estadounidense en las conversaciones con Irán, fue consultado en el programa "Fox News Sunday with Chris Wallace" por qué el acuerdo no contempla inspecciones en cualquier momento y lugar.
"El hecho es que en control de armas, no existe país alguno en este planeta en que rija 'en cualquier momento y lugar'", respondió.
"No existe ese estándar (...) dentro de las inspecciones de control de armas", explicó.
(Reporte de adicional de Michael Flaherty en Washington; escrito por Ralph Boulton. Editado en español por Patricio Abusleme)