Por Karolos Grohmann
BERLÍN (Reuters) - Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 dijeron el sábado que estaban "extremadamente preocupados", después de que el regatista alemán Erik Heil enfermó luego de obtener el tercer lugar en un evento de prueba realizado en la ciudad.
Heil, quien está siendo tratado en un hospital de Berlín por varias infecciones, dijo que estaba convencido de que fueron provocadas por las aguas contaminadas, aumentando la presión sobre los organizadores para garantizar la seguridad de los atletas en los eventos acuáticos de los Juegos Olímpicos del próximo año.
"Quedamos extremadamente preocupados cuando nos enteramos de que el atleta Erik Heil fue hospitalizado", dijeron los organizadores en un comunicado enviado a Reuters. "Nosotros contactamos inmediatamente a la Asociación Alemana de Vela (DSV, por sus siglas en alemán) para solicitar información", agregaron.
"Río 2016 está en contacto con la DSV y reitera que es nuestra prioridad garantizar la salud y bienestar de todos los atletas", sostuvieron.
El caso de Heil ha sido tomado por la Federación Olímpica Alemana de Deportes (DOSB, por sus siglas en alemán), que dijo presentaría el tema ante los organizadores de Río y la Federación Internacional de Vela (ISAF, por sus siglas en inglés).
La ciudad brasileña será la primera de Sudamérica que recibirá a los Juegos Olímpicos de verano y enfrenta problemas para limpiar las aguas en las que competirán los atletas.
"Nosotros también estamos siguiendo, junto a la ISAF, las obras realizadas por el gobierno del estado (de Río de Janeiro) para que las medidas (...) para mejorar la calidad del agua en la Bahía de Guanabara estén terminadas a tiempo, garantizando buenas condiciones para las líneas de competencia durante los Juegos de Río 2016", dijeron los organizadores.
El hospital de Berlín que trata a Heil, quien ganó el tercer lugar junto con Thomas Ploessel en la categoría 49er, le dijo que se infectó con gérmenes multi resistentes, explicó el equipo alemán de vela.
El año pasado, biólogos dijeron que los ríos que desembocan en la bahía contenían una superbacteria resistente a antibióticos que curan infecciones urinarias, gastrointestinales y pulmonares.
Cuando Río presentó su candidatura para los Juegos, la ciudad prometió que recortaría la cantidad de aguas residuales que llegan a la bahía en un 80 por ciento.
Sin embargo, desde entonces ha admitido que es poco probable que pueda cumplir esa meta y dijo que la cantidad de aguas residuales tratadas antes de que lleguen a la bahía subió de 17 a 49 por ciento.
(Editado en Español por Ricardo Figueroa)