MADRID (Reuters) - Los dos grandes partidos que se han alternado en el poder en España en los últimos 40 años cobran fuerza de cara a las elecciones generales de diciembre, según un sondeo publicado el lunes, que atribuye la mejoría en estimación de voto a la preocupación por la seguridad tras los atentados de París.
Según la encuesta de GAD3 para el diario ABC, Partido Popular y Partido Socialista Obrero Español obtendrían 222 escaños, casi dos tercios de un Congreso con 350 asientos con fuerte presencia de Ciudadanos y Podemos.
Según el sondeo, que muestra que el flujo hacia estos partidos emergentes se ha frenado, el PP lograría un 28,5 por ciento de los votos (129 diputados), lejos de la mayoría absoluta de 2011, un resultado que le obligaría a pactar con Ciudadanos, el partido con más coincidencias programáticas con la formación conservadora.
Pese a que paro y economía siguen primando entre las preocupaciones de los españoles, el problema de la seguridad se ha impuesto a otros como el desafío independentista en Cataluña, según explicó el presidente de la encuestadora GAD3, Narciso Michavila, en ABC.
Con un 22,8 por ciento de votos, el PSOE seguiría tras el 20 de diciembre como segunda fuerza del Parlamento con un 22,8 por ciento de los votos y 93 diputados, aunque por debajo de los resultados de hace cuatro años.
El sondeo argumenta que los emergentes obtienen mejores resultados cuando se habla de temas como regeneración democrática o corrupción, pero que acontecimientos como los ataques de París de hace una semana, donde murieron 130 personas, favorece a formaciones con una mayor experiencia en gestión.
El partido de Albert Rivera, que se ha sumado al pacto antiyihadista de PP y PSOE, seguiría tercero, con un 16,4 por ciento de los votos, lo que les daría unos 56 escaños, que unidos a los del PP sumarían la mayoría absoluta del Parlamento.
Desmarcado del resto de las fuerzas políticas con un mensaje más pacifista, el partido de Pablo Iglesias sube, rozando con un 15,8 por ciento el resultado de Ciudadanos, lo que les daría 44 diputados de una cámara en la que sale perdiendo Izquierda Unida, que bajaría hasta un 4,4 por ciento de los votos.
El sondeo se realizó entre el 26 de octubre y el 19 de noviembre entre 3.000 personas, 1.200 de las cuales fueron entrevistadas después de los ataques de París.