MADRID (Reuters) - El presidente del Gobierno en funciones y líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, anunció el miércoles que iniciará al día siguiente los contactos con el resto de partidos políticos para negociar la formación de un nuevo Ejecutivo en España y acabar con un bloqueo político de seis meses.
A pesar de que los resultados electorales del domingo reforzaron al PP al salir vencedor con 137 escaños, 14 más que en los comicios de diciembre, la formación aún está lejos de una mayoría suficiente para que Rajoy sea investido presidente en un Congreso con 350 asientos, por lo que necesitará contar con el apoyo directo o indirecto de otras formaciones.
"A partir de mañana yo empezaré a hablar con las distintas fuerzas políticas a ver la disposición de cada una de ellas para darle una salida a esta situación", dijo Rajoy en rueda de prensa desde Bruselas tras una cumbre de líderes europeos.
Rajoy ya ha manifestado su deseo de contar con el apoyo de los 85 diputados del PSOE para formar un gobierno estable de amplia mayoría, pero los socialistas han dicho que ni apoyarán ni se abstendrán en una eventual votación de investidura con Rajoy como candidato.
La otra opción que el actual presidente en funciones ha dicho explícitamente estar barajando es la de un gobierno con apoyo de los 32 diputados de Ciudadanos. Para ello además necesitaría contar con el Partido Nacionalista Vasco (PNV), que tiene cinco escaños, y con la diputada obtenida por Coalición Canaria.
Aún con toda esa amalgama de apoyos, Rajoy contaría con 175 escaños, uno por debajo de la mayoría absoluta, por lo que desde hace unos días se especula con que la llave del nuevo gobierno podría ser el diputado canario Pedro Quevedo, representante del partido regional Nueva Canarias que obtuvo su escaño tras presentarse en coalición con el PSOE.
Estas cuentas podrían desbloquear la situación política de España y quitar presión a los socialistas, que no quieren socavar su imagen como principal partido de la oposición pero algunos de cuyos barones regionales, como el extremeño Guillermo Fernández-Vara, ya han pedido que se permita gobernar a Rajoy.
Sin embargo, Quevedo ha negado que vaya a dar su apoyo al Partido Popular y tras las especulaciones de los últimos días quiso dejar claro que no votaría a favor de una eventual investidura de Rajoy como presidente.
"En ningún caso apoyaremos un gobierno del PP", dijo el canario en su cuenta de la red social Twitter. "Sería una renuncia a nuestros principios, al acuerdo con el PSOE y, sobre todo, a la gente que nos apoyó".
La opción que le quedaría a Rajoy es una posible abstención de Quevedo, lo que le permitiría contar con más votos a favor que en contra y sacar adelante su investidura.