SIDNEY (Reuters) - Las ciudades de la costa este de Australia fueron las primeras en el mundo en apagar las luces el sábado en la décima edición de la Hora del Planeta, un evento global pensado para concienciar sobre la amenaza que supone el cambio climático.
La ópera de Sidney, que normalmente luce muy brillante, apagó sus luces a las 20.30 hora local, junto a otros lugares simbólicos de la ciudad como el puente del puerto de Sidney y una docena de edificios en la ciudad y en Australia.
Más de 350 lugares emblemáticos como la Torre Eiffel, el Empire State y el edificio 101 de Taipei seguirán la iniciativa.
El tema de este año es la celebración de "Lugares que amamos", como playas, bosques, acantilados, montañas nevadas y ríos que podrían estar en peligro por el cambio climático.
Los organizadores esperan que este año pueda un punto de inflexión en las acciones climáticas tras el acuerdo entre líderes mundiales en París el pasado diciembre. El acuerdo estableció objetivos de reducción de emisiones para alcanzar un nivel cero de emisiones en 2100, cambiando combustibles fósiles en favor de energías limpias como la solar y eólica.
El director ejecutivo de la Hora del Planeta, Siddarth Das, dijo en un comunicado que el mundo se encuentra en un "cruce de caminos climático". "Desde los salones de estar a las clases y las conferencias, la gente está demandando acciones climáticas", añadió.
"La Hora del Planeta nos recuerda que la gente que está en primera línea del cambio climático, también son nuestra primera línea de defensa. Nuestras acciones de hoy, como individuos y como comunidad mundial, tienen el poder de transformar el mundo para las generaciones venideras", dijo Siddarth Das.