Por Fatos Bytyci
LEPOSAVIC, Kosovo (Reuters) - Unos 25 soldados de las fuerzas de paz de la OTAN que defendían tres ayuntamientos del norte de Kosovo resultaron heridos el lunes en enfrentamientos con manifestantes serbios, mientras el presidente de Serbia ponía al ejército en el máximo nivel de alerta de combate.
La KFOR, la misión de mantenimiento de la paz en Kosovo dirigida por la OTAN, condenó la violencia.
"Varios soldados del contingente italiano y húngaro de la KFOR fueron objeto de ataques no provocados y sufrieron heridas por trauma con fracturas y quemaduras debido a la explosión de artefactos incendiarios", dijo en un comunicado.
La televisión estatal serbia RTS citó a su Ministerio de Defensa diciendo que dos serbios habían resultado heridos en los enfrentamientos.
El presidente de Kosovo, Vjosa Osmani, acusó a su par serbio, Aleksandar Vucic, de desestabilizar Kosovo.
"Estructuras ilegales serbias convertidas en bandas criminales han atacado a la policía de Kosovo, a oficiales de la KFOR (fuerzas de mantenimiento de la paz) y a periodistas. Quienes cumplen las órdenes de Vucic de desestabilizar el norte de Kosovo, deben enfrentarse a la justicia", tuiteó Osmani.
La tensa situación se desarrolló después de que alcaldes de etnia albanesa tomaron posesión de sus cargos en la zona de mayoría serbia del norte de Kosovo tras unas elecciones que los serbios boicotearon, una medida que llevó a Estados Unidos y sus aliados a reprender a Pristina el viernes.
GAS LACRIMÓGENO
Los serbios, que son mayoría en el norte de Kosovo, nunca han aceptado la declaración de independencia de 2008 y siguen considerando Belgrado como su capital más de dos décadas después del levantamiento de los albanokosovares contra el régimen represivo serbio.
Los albaneses constituyen más del 90% de la población de Kosovo en su conjunto, pero los serbios del norte exigen desde hace tiempo la aplicación de un acuerdo de 2013, negociado por la UE, para la creación de una asociación de municipios autónomos en su zona.
El viernes, tres de los cuatro alcaldes de etnia albanesa fueron escoltados hasta sus oficinas por la policía, que recibió piedras y respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a los manifestantes.
Estados Unidos y sus aliados, que han apoyado firmemente la independencia de Kosovo, reprendieron a Pristina el viernes, afirmando que la imposición de alcaldes en zonas de mayoría serbia sin apoyo popular socavaba los esfuerzos por normalizar las relaciones.
(Reporte de Fatos Bytici; Información adicional de Miodrag Draskic y Angelo Amante en Roma; Escrito por Ivana Sekularac y Daria Sito-Sucic; Editado en español por Aida Peláez-Fernández)