Bruselas, 9 may (EFE).- El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, aseguró hoy que la zona del euro no está dispuesta a renegociar los términos del programa de asistencia financiera a Grecia tras las elecciones en el país que han mostrado un claro rechazo a la política de austeridad.
"Tenemos que respetar la democracia en Grecia, pero también la democracia en los 16 otros Estados miembros (de la zona del euro), que se han comprometido y ahora no están dispuestos a cambiar ese compromiso", recalcó Barroso en un debate con el presidente del Parlamento europeo, Martin Schulz, organizado por Europaforum y la cadena de televisión alemana WDR.
Barroso explicó que existe un acuerdo entre Grecia y sus socios del euro y que Atenas tiene que respetarlo de la misma manera que los demás países.
"Es una cuestión de credibilidad no solamente para Grecia sino para la eurozona en su conjunto", destacó y explicó que si el acuerdo no se respeta la primera perjudicada será Grecia y los ciudadanos más vulnerables.
El presidente de la CE aclaró que el programa de rescate griego no consiste sólo en medidas de consolidación, sino también de crecimiento e inversión, y en acciones centradas en la juventud.
"Por supuesto, algunas de las reformas son dolorosas y llevan tiempo e implican sacrificios", admitió Barroso, pero dijo que no hay alternativa y que incumplir lo acordado sería mucho más negativo para el pueblo griego.
Si no se reducen los niveles de déficit y deuda, Barroso advirtió de que los intereses que tiene que pagar los países seguirán aumentando, lo que dificultará la financiación de servicios sociales como la educación y el sanitario.
Además del esfuerzo de consolidación fiscal, Grecia necesita inversión y aprovechar mejor los recursos como los fondos estructurales que corresponden al país y aún no ha utilizado, para lo que la CE mantiene un grupo especial de trabajo sobre el terreno.
"Estamos creando progreso para la juventud", sostuvo Barroso y afirmó que las reformas estructurales no harán sino fomentar la competitividad y la inversión en el futuro de Grecia.
Necesitamos una combinación de políticas para potenciar al mismo tiempo la consolidación fiscal, las reformas y la inversión, agregó.
Barroso dijo que apoyar a Grecia también debe ser del interés de países como Alemania, que se encuentran en una situación económica mucho mejor, porque Berlín también se beneficia del mercado interior.
El político portugués recordó, por otro lado, que las decisiones que se toman en la UE son consensuadas entre sus Estados miembros y que el programa para sacar a Grecia de la crisis se ha elaborado conjuntamente con las autoridades de Atenas y, por lo tanto, no debería responsabilizarse a Bruselas en exclusiva.
El presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, por su parte, señaló que el pueblo griego ha expresado su voluntad en las urnas y admitió que "quizás no sea el resultado que nos hubiera gustado" y confió en que Grecia encuentre "una vía hacia la sensatez". EFE