Por Renee Maltezou y Angeliki Koutantou
ATENAS, 23 jul (Reuters) - Miles de turistas y residentes que huyeron de un incendio forestal en la isla griega de Rodas se protegieron el domingo en escuelas y refugios, y muchos fueron evacuados de las playas en embarcaciones privadas mientras las llamas amenazaban complejos turísticos y pueblos costeros.
Miles de personas pasaron la noche en playas y calles.
Los operadores turísticos Jet2, TUI (ETR:TUI1n) y Correndon cancelaron los vuelos con destino a Rodas, situada al sureste de la Grecia continental y famosa por sus aguas cálidas y sus yacimientos arqueológicos.
Los bomberos dijeron que 19.000 personas fueron trasladadas de casas y hoteles, calificándolo como el mayor transporte seguro de residentes y turistas que Grecia ha llevado a cabo.
"Fue literalmente como el fin del mundo", dijo a Sky News el turista británico Ian Murison desde un barco de rescate al que llegó después de que la multitud llenara los autobuses en una caótica evacuación de una playa.
Los incendios son habituales en Grecia, pero los veranos más calurosos han provocado más en los últimos años, debido al cambio climático.
Barcos guardacostas y embarcaciones privadas sacaron a más de 3.000 turistas de las playas el sábado, después de que se reavivara el incendio forestal, que lleva ardiendo casi una semana, en el sureste de Rodas. Otras zonas de la tercera isla más poblada de Grecia, incluida la ciudad principal, Rodas, no se vieron afectadas.
Muchas personas huyeron de los hoteles cuando las enormes llamas alcanzaron los pueblos costeros de Kiotari, Gennadi, Pefki, Lindos, Lardos y Kalathos. Multitudes se congregaron en las calles bajo un cielo rojo mientras el humo se cernía sobre las costas desiertas.
Otra turista británica, Amy Leyden, describió la "aterradora" experiencia de ser trasladada de dos hoteles con su hija de 11 años antes de ser llevada a una escuela.
"Caminábamos por la carretera a las dos de la mañana y el fuego nos estaba alcanzando", declaró a Sky.
En Lindos, famosa por su acrópolis sobre una enorme roca rodeada de murallas medievales, el fuego ennegreció la ladera y carbonizó los edificios.
Thanasis Virinis, vicealcalde de Rodas, declaró el domingo a la cadena de televisión Mega que entre 4.000 y 5.000 personas se encontraban en alojamientos provisionales, y pidió donaciones de artículos de primera necesidad, como colchones y ropa de cama.
Los evacuados se trasladaron a hoteles, estadios cubiertos, centros de conferencias y edificios escolares, donde recibieron alimentos, agua y asistencia médica, según las autoridades.
Una mujer embarazada y otra persona fueron hospitalizadas, dijo el portavoz de los bomberos Ioannis Artopoios.
"CADA VEZ MÁS HUMO"
Ciudadanos franceses, alemanes, holandeses y británicos se encontraban entre los turistas en Rodas, que, según un hotelero, puede recibir 150.000 visitantes a la vez en temporada alta. La población residente en la isla ronda los 125.000 habitantes.
Un turista francés en Lindos dijo que en los últimos días había observado una frecuencia cada vez mayor de aviones anfibios de extinción de incendios. Las imágenes de televisión mostraban cómo los aviones amarillos recogían agua del mar.
"Todo está sucediendo muy deprisa, cada vez vemos más humo", declaró a la televisión francesa el turista, que sólo dio su nombre, Hugo.
Un turista británico agradeció la generosidad de la población local en una entrevista con la televisión griega, en la que dijo que las tiendas se negaron a cobrar el agua y la comida y que pequeñas embarcaciones habían puesto a salvo primero a mujeres y niños, antes de volver a por los hombres.
Mientras el aeropuerto de Rodas se llenaba de gente, el Ministerio de Relaciones Exteriores heleno informó de la creación de un servicio de asistencia para las personas que habían perdido sus documentos de viaje.
Protección Civil advirtió de un riesgo muy alto de incendios forestales el domingo en casi la mitad de Grecia, donde se esperaba que las temperaturas alcanzaran los 45 Celsius.
(Reporte adicional de Elizabeth Piper en Londres, Christoph Steitz en Fráncfort, Andi Kranz en Colonia y Mathieu Rosemain en París; escrito por Frank Jack Daniel; editado en español por Carlos Serrano)