BAGDAD (Reuters) - Miembros del grupo radical Estado Islámico mataron a 38 policías el lunes al hacer chocar un tanque lleno de explosivos contra una base militar al sur de la ciudad iraquí de Samarra, dijeron fuentes de las fuerzas de seguridad.
Otras 46 personas resultaron heridas en el ataque a la instalación de Muthanna, en una zona desde la cual fuerzas de seguridad y paramilitares chiíes han estado luchando para expulsar a los insurgentes.
Días atrás, las fuerzas de seguridad tomaron el control del complejo de manos de los militantes y lo estaban usando como punto de apoyo en una ofensiva que apunta a cortar las líneas de suministro de Estado Islámico desde la zona de Samarra hacia la provincia de Anbar, en el oeste de Irak.
La capital de Anbar, Ramadi, fue capturada por los insurgentes hace dos semanas, en lo que fue el revés más importante para las fuerzas iraquíes desde que la coalición liderada por Estados Unidos comenzase a bombardear al grupo extremista durante el último verano.
El primer ministro de Irak, Haider al-Abadi, prometió lanzar una rápida contraofensiva para recuperar la ciudad, pero grupos paramilitares chiíes que se han hecho cargo de esa operación señalan que primero deben eliminarse algunos bastiones de los combatientes del Estado Islámico en la provincia de Salahuddin.