Por Ian Ransom
(Reuters) - Con un número de lesiones récord en el Open de Australia, pocos culparían a Rafa Nadal por sentirse inquieto cuando entra a jugar a Melbourne Park, pero el jugador español en forma y sano espera comenzar la temporada lleno de "buenas sensaciones".
Después de ganar el título en 2009, Nadal se vio obligado a abandonar la lucha por retener el título por problemas de rodilla ante Andy Murray, cayó en semifinales ante su compatriota David Ferrer con problemas físicos y sufrió con una lesión de espalda en la final en 2014 que perdió ante el suizo Stan Wawrinka.
Nadal se perdió el torneo en 2013 con un virus estomacal cuando se recuperaba de problemas en la muñeca y una operación de apendicitis, y el año pasado cayó en cuartos de final ante Tomas Berdych en tres sets, en una de sus peores derrotas en su historia en grand slam.
Combatiendo lesiones o enfermedades, extrañamente Nadal ha llegado al Open de Australia sin problemas que minen su confianza así que la buena forma que exhibe este año le ha servido de aire fresco.
"He hecho buenos entrenamientos aquí (...) estoy muy feliz de volver y tengo buenas sensaciones, intentando estar listo para competir", dijo a periodistas en una rueda de prensa en Melbourne Park el sábado.
Para la mayoría de tenistas, los tres títulos que cosechó Nadal en 2015 habrían sido un éxito, pero no lograr pasar los cuartos de final en ninguno de los cuatro grand slam evidencia que su juego no pasa por su mejor momento, sobre todo para un 14 veces ganador de grand slam.
No obstante, el español de 29 años ha evitado grandes lesiones en la última parte de la temporada, lo que le ha permitido afrontar la pretemporada más sólida en muchos años.