Por Brendan O'Boyle, Henry Romero y Carlos Carrillo
VILLA VICTORIA, México, 27 abr (Reuters) - Todos los días, en un pozo cerca de su casa en el centro de México, Isabel Solís llena garrafas de plástico con agua de río y las carga en su burro para llevarlas a casa para cocinar, limpiar y beber.
Solís, de 64 años, vive a orillas del embalse de Villa Victoria en México, que suministra agua a la bulliciosa capital a horas de distancia pero que no llega a sus propios grifos.
"Tienen agua los que tienen billetes", dice Solís.
Villa Victoria es parte del Sistema Cutzamala, la fuente de agua para unos seis millones de personas en la Ciudad de México y el estado de México, que rodea la capital.
El cambio climático, el caótico crecimiento urbano y la infraestructura ineficiente han puesto a prueba los suministros de agua de México, llevando los niveles de almacenamiento del Sistema Cutzamala a mínimos de 27 años.
El estrés hídrico es un problema para gran parte del país. Este mes, unos 200,000 habitantes de la ciudad de San Luis Potosí sufrieron escasez de agua durante 22 días, dijo el alcalde, luego de fallas en la tubería de un importante embalse.
Casi la mitad de los municipios de México estaban experimentando sequía a fines de marzo, según la agencia nacional de agua CONAGUA.
"El cambio climático lo estamos viendo en la presencia de las sequías, como lo mencionaba en el centro norte del país, pero también tenemos efectos contrarios a la sequía", dijo el director de CONAGUA, Germán Martínez. "En la parte sur sureste del país tenemos lluvias abundantes", sostuvo.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha presionado a las empresas para que inviertan en el sur del país, ante el argumento de que el agua es demasiado escasa en el norte más industrializado.
La campaña casi amenazó con descarrilar este año un acuerdo con el fabricante de vehículos eléctricos Tesla (NASDAQ:TSLA) para que instale una fábrica con una inversión de 5,000 millones de dólares.
EL AGUA QUE NO SE APROVECHA
La infraestructura también es un aspecto preocupante, dado que la red que transporta agua hacia y a través de la capital desde las zonas más altas de México está plagada de fugas.
"Las fugas son un problema en nuestro país, en todos los sistemas de distribución de agua potable, todos, en todas las ciudades, en todos los pueblos", dijo Martínez, ya que según explicó México pierde en promedio entre un 30% y 40% del suministro hídrico por esta causa.
"El sistema de distribución es muy deficiente", declaró.
Si bien la temporada de lluvias de la extensa región de la capital ayuda a reponer los embalses, la mayor parte de las precipitaciones no se capturan.
No ayuda que la Ciudad de México, una de las urbes más pobladas de América, haya crecido "sin una planeación adecuada", según dijo Ramiro Gutiérrez, ingeniero y subgerente de abastecimiento de agua potable de CONAGUA.
Gutiérrez explicó que las aguas de lluvia "ya no se infiltran en el subsuelo porque ahora está tapado por carreteras o casas", a lo que se suman tormentas cada vez más fuertes que concentran las precipitaciones en menos días y dificultan la captura del recurso.
Las autoridades están tomando medidas para aumentar el suministro de la región capitalina.
El año pasado, los gobiernos de la Ciudad de México y el estado de México anunciaron una mejora de un canal por 300 millones de pesos (16.5 millones de dolares) con CONAGUA en el estado Michoacán para aumentar el flujo al embalse El Bosque, que según las autoridades proporcionará más agua a las comunidades aledañas al Sistema Cutzamala.
La Ciudad de México también está aprovechando fuentes alternativas de agua fuera del Sistema Cutzamala, incluso reemplazando pozos en el área de Zumpango, en el Estado de México.
A fines de marzo, la Fuerza Aérea de México comenzó lo que se conoce como siembra de nubes sobre el Sistema Cutzamala, un proceso de liberación de yoduro de plata para estimular la condensación y, en última instancia, la lluvia.
El meteorólogo y segundo capitán de la Fuerza Aérea, Ricardo Torres, dijo a Reuters que la estrategia fue "muy exitosa" en los estados Nuevo León y Tamaulipas y que se empleará hasta el 7 de mayo para tratar de restaurar los embalses del Sistema Cutzamala.
La Constitución de México garantiza el derecho de acceso al agua, lo que agrega urgencia a los esfuerzos de los funcionarios. Pero para personas como Israel, que vive a pocos minutos en auto de la planta de tratamiento del Sistema Cutzamala y pidió no usar su apellido, esta promesa es cada vez más lejana.
"Ahorita, en estos últimos años ha sido más complicado, ya, ya se carece más del agua", dijo Israel a Reuters mientras llenaba un tanque en su casa con agua que extrajo de un río a fin de lavar y realizar tareas domésticas.
"Antes, no necesitábamos batallar mucho con el agua".
(1 dólar = 18.1216 pesos mexicanos)
(Reportes de Brendan O'Boyle, Carlos Carrillo y Henry Romero, reporte adicional de Stephen Eissenhammer. Editado en español por Marion Giraldo)