MADRID (Reuters) - Un grupo de unos 60 inmigrantes logró el lunes entrar en Melilla después de que cientos de ellos intentasen saltar la valla fronteriza que separa el enclave español en África de Marruecos, informó la Delegación del Gobierno.
Un grupo de unos 150 inmigrantes logró alcanzar la valla y realizó varios intentos cerca de la frontera de Beni-Enzar, la zona donde los inmigrantes finalmente lograron cruzar.
"Es ahí, en el trecho próximo al principal paso fronterizo entre Melilla y Marruecos, por donde un grupo de unos 60 inmigrantes logra vulnerar el dispositivo anti-intrusión y, a la carrera, consigue adentrase en la ciudad", dijo la delegación, que añadió que no hubo heridos.
Previamente, un grupo de un tamaño similar se acercó a la valla fronteriza pero fue interceptado por las fuerzas marroquíes, dijo la Delegación.
El Gobierno español ha tratado de frenar los intentos de entrada con una valla de cuatro metros de altura coronada por una malla antitrepa en la mayor parte de los 12 kilómetros de frontera, que también cuenta con unas polémicas concertinas - alambres de cuchillas - muy criticadas por las organizaciones humanitarias.
En 2013, un total de 4.235 inmigrantes llegaron a Ceuta y Melilla, un 48,5 por ciento más que en 2012, según datos del Ministerio del Interior, que habla de la existencia de una fuerte presión migratoria.
El aumento del flujo de intento de acceso a Melilla ha saturado el centro de estancia temporal, en el que se han tenido que colocar grandes carpas para acoger a los inmigrantes mientras se tramita su posible repatriación.
Muchos de los inmigrantes son trasladados finalmente a la península y acaban marchándose al resto de Europa.
Los países del sur de Europa como España e Italia han pedido a la UE y a Naciones Unidas que se impliquen más en la búsqueda de una solución a esta situación, que ha empeorado en los últimos años por la inestabilidad en países del norte de África como Libia o en otras naciones en conflicto como Siria.
Unos 300 inmigrantes trataron de cruzar el pasado miércoles a Melilla, un intento que se saldó con cinco inmigrantes y cinco guardias civiles heridos.