Por Tim Hanlon
BARCELONA (Reuters) - El exresponsable de la secretaría técnica del Barcelona Albert Valentín ha culpado a los juegos de poder de su destitución y la del entonces director deportivo, Andoni Zubizarreta, y está buscando un nuevo reto lejos de la olla a presión que es en estos momentos la Liga española.
Zubizarreta y su mano derecha, Valentín, que supervisaba los fichajes, fueron destituidos el mes pasado como consecuencia de la prohibición de la FIFA de fichar, durante dos mercados --el de este invierno y el del próximo verano-- por haber incumplido las normas de fichajes de menores de 18 años.
Las críticas de los seguidores también se han construido sobre los errores en los mercados de fichajes y su supuesta participación en el escándalo por el coste real de Neymar.
"No he hablado con ningún medio aquí porque no creo que se hayan comportado bien con nosotros", dijo Valentín en una entrevista concedida a Reuters. "Mi ilusión después de todo lo que ha pasado es seguir mi trabajo en otro ambiente que no sea en España", añadió.
"He leído las noticias sobre el Liverpool pero no sé de dónde vienen y no he hablado con nadie", ha explicado, en referencia a diferentes artículos que indican un posible interés del equipo inglés en Valentín.
"El problema con el Barcelona es que siempre hay un entorno de poder", explicó. "Muchas veces es el director deportivo el que tiene que apagar fuegos y es al que todos buscan cuando hay problemas", añadió.
Valentín dijo que "Zubizarreta siempre estaba intentando ser conciliador", pero que "al final se hartó de la situación", y explicó que siente que abandonaron al director deportivo tras la sanción de la FIFA.
"El error con los fichajes de estos jóvenes fue enorme aunque diría que estos errores pasan cuando estás tratando con cientos de jóvenes", explicó el exsecretario del club blaugrana, antes de añadir que "está pasando en otros clubes también".
"Es verdad que la FIFA ha tirado un dardo a un club que era reconocido por el mundo por su cantera", añadió.
EVALUACIONES DIFERENTES
Valentín niega que Zubizarreta y los que estaban trabajando en el departamento técnico fueran los culpables del fichaje de Neymar, el primero en ser investigado después de que un socio del club tomara acciones legales para aclarar el precio del fichaje.
En un principio, el equipo dijo que se habían gastado 57,1 millones de euros en el delantero brasileño cuando firmó su contrato y el expresidente, Sandro Rosell, repitió esta cifra hasta la saciedad.
No obstante, cuando se le pidió a Rosell que presentara pruebas después de que un juez decidiera investigar una posible evasión fiscal, dimitió, aunque siguió negando que hubiera actuado de forma incorrecta.
El proceso judicial sigue adelante, pero ahora la Fiscalía ya dice que el coste real de Neymar fue de 94,9 millones de euros, unos 37 millones más de lo que se había dicho.
"Hice mi informe sobre Neymar después de los campeonatos sub 20 en Perú en 2011. En este caso, Zubizarreta y yo nos quedamos fuera" (de las negaciones sobre el jugador), dijo Valentín a Reuters.
"No creo que en ningún otro lugar hubiera habido un situación en la que un socio lleva al club a un juicio así", añadió.
Valentín llegó al equipo azulgrana, tras haber sido secretario técnico del Espanyol, junto a Zubizarreta a comienzos de la presidencia de Rosell en 2010.
"Espero que a lo largo de la historia se evalúe nuestro trabajo de forma diferente", explicó, indicando que tuvieron que hacer frente al declive del que era "posiblemente" el mejor equipo del mundo.
"Tuvimos diferentes entrenadores, estaba la enfermedad de (el entrenador) Tito (Vilanova) y después el 'Tata' (Martino) vino para un año", explicó. "Luego fueron factores externos que no tenían nada que ver con nosotros ni con el fútbol, como el caso Neymar, el lío con Messi y Hacienda y la sanción de la FIFA".
"No he hablado con (el exentrenador Pep) Guardiola después de que se fuera sobre sus razones, pero él sabía los problemas a los que se enfrentaba el club y la reestructuración de la plantilla", añadió.
"Conocía las guerras alrededor del club, y seguro que le incomodaban", concluyó.