Seúl, 30 dic (EFE).- La Bolsa de Seúl cerró hoy su última sesión del año con un descenso debido a la preocupación de los inversores sobre las bajas previsiones de beneficios de las principales corporaciones de Corea del Sur, según los analistas locales.
El índice referencial Kospi bajó 5 puntos, el 0,25 por ciento, hasta 1.961,31 unidades en una sesión en la que se movieron 3.120 millones de dólares, mientras que el tecnológico Kosdaq, por el contrario, subió 9,13 puntos, el 1,36 por ciento, hasta los 682,35 enteros.
Tras aproximarse a la cota de los 2.000 puntos la semana pasada, el principal indicador del mercado de valores surcoreano volvió a perder terreno en una sesión de baja actividad en la que los inversores optaron por las ventas.
Los expertos surcoreanos atribuyeron la falta de apetito inversor a las previsiones, pesimistas en general, sobre los resultados de las principales empresas del país en el cuarto trimestre, que se publicarán en enero.
El principal fabricante de automóviles del país, Hyundai Motor (KS:005380), cerró hoy sin cambios, su filial Kia Motors (KS:000270) bajó un 0,94 por ciento y el fabricante de autopartes del grupo, Hyundai Mobis (KS:012330), vio caer sus acciones un 0,4 por ciento.
Hyundai Heavy Industries (KS:009540), el mayor astillero del mundo, perdió un 2,44 por ciento de su valor en la jornada de hoy, que también dejó pérdidas en el sector de la siderurgia, donde la multinacional del acero Posco (KS:005490) se contrajo un 1,77 por ciento y Hyundai Steel cotizó un 4,49 por ciento a la baja.
En la otra cara de la moneda, los valores tecnológicos cerraron con ganancias, que en el caso de Samsung Electronics (KS:005930) fueron del 0,48 por ciento y del 2,67 por ciento en el de LG Electronics (KS:066570).
La moneda local perdió 2,9 unidades frente al dólar, que se intercambiaba en 1.172,5 wones al cierre de la sesión.