Tokio, 16 sep (.).- La Bolsa de Tokio avanzó hoy finalmente tras una semana negra ante las crecientes expectativas de que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos posponga una subida de tipos tras la publicación de unos indicadores económicos débiles.
El índice de referencia Nikkei avanzó 114,28 puntos, un 0,70 por ciento, y quedó en 16.519,29 enteros; mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, ganó 10,39 puntos, un 0,80 por ciento, y cerró en 1.311,50 unidades.
El sector de la banca lideró las ganancias, seguido por el de los seguros y el de los instrumentos de precisión.
Tokio mostró su primer avance sólido de la semana (a excepción del cierre mixto que cosechó el martes), ya que los inversores se envalentonaron tras las ganancias cosechadas en Wall Street el jueves (el Dow Jones de Industriales subió 0,99 por ciento, el S&P 500 avanzó un 1,01 por ciento y el Nasdaq progresó 1,47 por ciento).
Los datos económicos dispares publicados la víspera en la primera potencia económica mundial -las peticiones del subsidio de desempleo subieron la semana pasada menos de lo previsto, pero las ventas minoristas bajaron en agosto por primera vez desde marzo- fueron bien acogidos en Tokio, ya que aumenta las expectativas de que no se produzca próxima subida de tasas.
Y es que la evolución del mercado laboral es uno de los principales datos que valora la Fed -que celebrará la próxima semana su reunión de dos días sobre política monetaria- para ver si sube los tipos de interés.
Pese al avance, las ganancias en Tokio fueron limitadas ante la perpetua fortaleza del yen frente al dólar y porque los inversores se abstuvieron de realizar movimientos arriesgados antes de la reunión del comité de política monetaria del Banco de Japón (BoJ) de la semana que viene.
El banco central nipón podría profundizar en su política de tipos negativos, pero "los inversores están empezando a darse cuenta de los límites de la política", que también tiene el efecto de exprimir la rentabilidad de los prestamistas, dijo el analista Norihiro Fujito, de Mitsubishi UFJ (T:8306) Morgan Stanley (NYSE:MS), en declaraciones a la agencia Kyodo.
La salida al mercado hoy del nuevo dispositivo iPhone 7 de Apple (NASDAQ:AAPL) impulsó las acciones de proveedores del gigante estadounidense como el fabricante de componentes electrónicos Murata Manufacturing (T:6981), que subió un 4,2 por ciento.
Por su parte, las electrónicas TDK (T:6762) y Alps Electric (T:6770) escalaron un 4 y un 6,3 por ciento, respectivamente.
En la otra cara de la moneda se situaron las compañías orientadas a la exportación como el fabricante de vehículos Toyota Motor (T:7203), que cayó un 1,7 por ciento lastrada por la situación del yen; o Fuji Heavy Industries (T:7270), fabricante de los vehículos Subaru (T:9632), que bajó un 1,3 %.
En la primera sección, 1.410 valores avanzaron, frente a 466 que retrocedieron, mientras que 101 terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,130 billones de yenes (18.600 millones de euros), frente a los 1,874 billones de yenes (16.360 millones de euros) de la víspera.
Al igual que hoy, el yen y los mensajes contradictorios de varios miembros de la Fed sobre si habrá o no una pronta subida de tipos en EE.UU. fueron las principales veletas en Tokio durante la semana.
El parqué nipón abrió con caídas el lunes siguiendo el cierre pesimista en Wall Street del pasado viernes después de que resurgieran los rumores de una próxima subida de tipos; el martes, sin embargo, cuando se desvanecieron tímidamente, Tokio cosechó un cierre mixto, animado por la idea, pero con el yen todavía pesando.
Miércoles y jueves Tokio volvió a caer hasta recuperarse finalmente hoy, después de que la batería de datos económicos débiles en EE.UU. alejasen nuevamente el temor a la subida.