En este artículo del 23 de junio analizamos la posibilidad de que la materia dorada logre superar los 2.000 dólares. Todos pudimos ver el rally alcista y la superación de la barrera de los 2.000 hasta lograr un máximo histórico en 2.080. Ahora bien, si te perdiste la primera fiebre del oro podríamos estar en los inicios de la segunda.
Como se aprecia en la imagen, el precio del oro cotiza en tendencia alcista, la misma se determina claramente mediante un canal ascendente que parte de los mínimos anuales generados en marzo. En el gráfico diario vemos dos ondas de impulso y dos de corrección, actualmente estamos transitando en la segunda corrección, pero la base del canal y el soporte en los 1.900 pueden despertar a una siguiente onda impulsiva que lleve al oro a nuevos máximos.
¿Que debe suceder técnicamente para que el oro vuelva a arrancar?
Para analizar en detalle vamos a introducirnos al gráfico horario, en donde vemos como el oro se mantuvo en congestión en la zona que abarca desde los 1.900 a 1.960. Es un tramo lateral de corto plazo, y para que el precio del oro vuelva a iniciar un rally alcista debería de poder quebrar el lateral por el lado superior, es decir, romper la resistencia en 1.960 antes de introducirse por debajo de los 1.900.
En resumen, tenemos una clara estrategia y oportunidad para sumarnos a una tendencia alcista ya iniciada, dentro de un valor que se encuentra fuerte, pero en proceso correctivo en gráfico diario y en periodo de consolidación en horario.
A pesar de que el escenario más probable es la continuidad alcista en la materia prima, siempre debemos contar con un nivel de seguridad en caso de que la operativa no cumpla con las expectativas. El nivel de stop loss se recomienda ubicarlo por debajo del soporte en 1.900, porque su pérdida generaría una corrección mayor que podría llevar al precio a la siguiente zona de control en los 1.800.