No cabe duda que vivimos en un mundo cada vez más globalizado. Todos los días, 40.000 personas viajan por aire entre Estados Unidos y Asia y un número similar lo hace entre estados Unidos y Europa. Cuando Nike (NYSE:NKE) produce más calzado deportivo para deportistas alrededor del mundo, los habitantes de China, Indonesia y Malasia tienen más trabajo. Cuando Apple (NASDAQ:AAPL) diseña un nuevo celular, las fábricas de China, Japón, Corea y Taiwán producen y ensamblan partes. Todo este proceso se retroalimenta todos los días y es producto de la especialización. Per, ¿por qué se especializan los países?.
Los principios económicos importantes para abordar esta reflexión son el costo de oportunidad y la ventaja comparativa. El costo de oportunidad es la alternativa de mayor valor a la que renunciamos para obtener algo. Por ejemplo, si decido estudiar una maestría a tiempo completo, mi costo de oportunidad es el salario que dejo de recibir cuando dejo de trabajar. Por otra parte, se dice que una persona o un país tienen una ventaja comparativa en una actividad si pueden realizarla con un costo de oportunidad menor que el resto.
Estos dos conceptos fueron desarrollados por David Ricardo para construir una teoría alrededor del comercio. Para Ricardo, los países deben dedicarse a producir aquellos productos en los cuales tienen una ventaja comparativa y exportarlos. Luego, importar aquellos productos que no se producen localmente de países que tienen ventaja comparativa en producirlos. El resultado es que los países se dedican a producir lo que mejor hacen y el resto lo importan. Esto les permite alcanzar un mayor nivel de consumo que si no comerciaran y se dedicaran a producir todos los bienes de la economía.
En este proceso de apertura económica nos hemos encontrado los últimos años. Perú es hoy una economía más abierta que una década atrás. Una forma interesante de medir el nivel de apertura de un país es utilizar como indicador la suma de sus exportaciones e importaciones como proporción del producto bruto interno. El gráfico 1, muestra cómo ha evolucionado este indicar de apertura en los últimos años. Los datos utilizados se obtuvieron de Penn World Table, que contiene información para más de 50 años y más de 150 países.
En los últimos años, Perú se ha embarcado en un proceso de apertura económica a través de la firma de una serie de Tratados de Libre Comercio, algo que ha permitido que los peruanos tengamos acceso a un número mayor de productos a precios económicos. Por otra parte, nuestros productos llegan a una cantidad importante de países sin pagar tarifas por lo que la economía local se ha ido especializando en la producción de productos peruanos demandados por el mundo.
La pregunta válida es, ¿es bueno el comercio?. En teoría sí es bueno, al menos eso nos diría Ricardo. Aunque es cierto que en el proceso de especialización hay algunos trabajadores que pierden trabajo y deben aprender sobre nuevas industrias en las cuales el país decida especializarse. ¿Que nos muestra la experiencia internacional? El gráfico 2 muestra el nivel de apertura económica para más de 150 países en el eje Y, y el nivel de PBI per cápita en el eje X (año 2011). Es decir, nos indicaría si existe algún tipo de relación entre el nivel de apertura económica y el producto per cápita de una economía.
Como puede notarse, existe una relación positiva entre las dos variables. Es decir, las economías con mayor apertura económica, logran un mayor nivel de producto per cápita y por lo tanto una mayor posibilidad de consumo per cápita. Podríamos decir entonces que Ricardo estaba en lo correcto.
No cabe duda que hoy nos encontramos en una mejor situación que hace 20 años. La apertura económica que ha experimentado Perú ha permitido que hoy tengamos acceso a tecnología de última generación y automóviles a precios accesibles, por ejemplo. También ha dado origen a nuevas industrias que han ido surgiendo. Por ejemplo, hoy somos uno de los principales exportadores de quinua del mundo y nuestra oferta culinaria resalta sobre el resto.
Queda la tarea de seguir trabajando en dicha dirección y continuar fortaleciendo sectores donde tenemos ventajas comparativas, el sector forestal entre otros. No me cabe duda que podríamos ser una potencia mundial en la industria maderera, algo así ha logrado Chile con menores condiciones que las peruanas en términos de terreno, biodiversidad y clima. Y como este, varios sectores en los cuales Perú tiene ventajas comparativas. Como dice el dicho: “lo mejor está por venir”.