Los mercados esperan que la tasa de desempleo de EE.UU. haya disminuido al 3,8% en septiembre. Las nóminas no agrícolas deberían haber disminuido a 185.000 desde los 204.000 del mes anterior. Se prevé que las ganancias promedio por hora hayan bajado hasta el 2,8% desde el 2,9% de agosto. Todos los indicadores han estado en verde en el mercado laboral.
El desempleo está en su nivel más bajo desde el milenio. La inflación se ha estado moviendo en la dirección correcta. Este escenario ideal ha permitido a la Reserva Federal subir los tipos de interés ocho veces en los últimos tres años. Según las últimas proyecciones, lo más probable es que este ciclo se detenga en 2020. Para entonces, la tasa de fondos de la Fed alcanzaría alrededor del 3,4%. Por lo tanto, ¿qué factor impulsará las tasas de cambio? El dólar de EE.UU. ha tenido un agradable paseo desde el comienzo del año, pero no ha logrado extender las ganancias a pesar de la ampliación del diferencial de tipos de interés frente a la mayoría de sus pares de divisas. Se puede argumentar que la reducción del balance de la Reserva Federal se convertirá en el principal impulsor del dólar, pero creemos que la evolución del mercado laboral y la inflación seguirá siendo un factor clave.