Y el premio al mejor metal de septiembre es para... el más tranquilo de la clase.
Si ha estado obsesionado con el oro y la plata, o con el paladio y el platino, es posible que no haya visto la gran actuación del aluminio este mes. Por primera vez en casi un año, ha subido dos dígitos en un mes, lo que lo convierte en el metal de mejor rendimiento de septiembre.
Si bien esta subida puede ser extraordinariamente grande para el aluminio, el hecho de que se haya producido durante un mes en el que casi todos los demás metales han caído espectacularmente lo hace aún más notable.
El martes, antes de la apertura de la Bolsa de Metales (LME) de Londres, el aluminio a tres meses cotizaba a 2,883 dólares por tonelada. En lo que va de mes, ha subido un 10,3% con respecto al cierre de agosto, de 2.610,50 dólares.
Si ese precio al contado del aluminio de la LME se mantiene en torno a ese punto hasta el jueves, registraría su mayor ganancia mensual en tres años y medio, lo que se remonta a abril de 2018, cuando subió un 13,7%.
El otro hito importante para el aluminio, por supuesto, son los máximos de 10 años registrados la semana pasada por el precio al contado a un mes de la LME cuando alcanzó los 2.976,75 dólares por tonelada.
Todos los demás metales principales han registrado pérdidas en septiembre: el oro ha bajado un 4%, la plata un 6%, el cobre un 1% y el platino un 3%.
¿Cuál es la historia del aluminio? ¿Será capaz de conservar su encanto?
Todos los gráficos cortesía de SK Charting
Las limitaciones de suministro de China y la fuerte demanda se han combinado produciendo la explosión de los precios del aluminio en la LME en septiembre. Para los no iniciados, los precios del aluminio han subido todos los meses de este año, desde febrero. La mayor rentabilidad antes de este mes fue de un 9% en abril. En lo que va de año, ha subido un 46%, todavía por detrás de la extraordinaria subida del 72% del estaño.
Daniel Hynes, analista de materias primas de ANZ Commodity, escribía recientemente una entrada en un blog sobre el aluminio:
"El metal, que se utiliza para todo, desde piezas de automóviles hasta electrodomésticos, se ha comportado bien al recuperarse la demanda de los consumidores y la actividad económica. Sin embargo, es el creciente riesgo de nuevas interrupciones del suministro en China lo que está provocando angustia en el mercado".
China —el mayor productor mundial de aluminio— ha tomado medidas contra la contaminación aplicando reformas destinadas a descarbonizar la economía del país. A principios de este año, el Gobierno chino limitaba el consumo de electricidad de las industrias de alto consumo energético, como la producción de aluminio y acero. Junto con la escasez de energía en muchas partes de China, varias fundiciones de aluminio situadas en las provincias de Guangxi y Xinjiang tuvieron que limitar su producción durante el año.
ABN Ambro señalaba en un informe publicado en mayo:
"[El precio más firme del aluminio] se vio impulsado por el optimismo en torno a la recuperación económica mundial, las esperanzas de solidez a largo plazo de la demanda de metales en relación con la transición energética y las preocupaciones en torno a las futuras tendencias de la oferta".
La disminución de la producción china de aluminio también podría respaldar los precios. Muchas provincias chinas incentivan la producción de aluminio ofreciendo tarifas eléctricas reducidas a los productores del metal. Sin embargo, el Gobierno chino prohibió la práctica de las tarifas eléctricas preferenciales para la industria del aluminio en una política de descarbonización anunciada el 27 de agosto. Esta política forma parte de la reforma de China para la transición a una economía verde y de bajas emisiones de carbono.
A pesar de los brillantes fundamentales, la acción del aluminio en sí mismo en los gráficos sugiere que podría estar llegando un enfriamiento a un mercado que lleva subiendo ocho meses sin descanso.
Sunil Kumar Dixit, estratega técnico jefe de SK Charting, en la India, dijo que, a pesar del éxito de septiembre, la acción del precio diario del aluminio en el gráfico indica una corrección por tercera jornada consecutiva, evidentemente presionado por los máximos de 10 años registrados la semana pasada.
Y añade: "Dejando de lado el gráfico diario, los indicadores semanales y mensuales muestran claramente que el aluminio ha estado surfeando una ola iracunda y parabólica".
"La lectura del indicador estocástico de fuerza relativa en el gráfico mensual de 100/100 grita a voces que el repunte está sobrepasado y que habrá una corrección en cualquier momento, con lo que probablemente vuelva a visitar las zonas de 2.700-2.500 dólares como objetivos inmediatos".
"Los precios podrían debilitarse y situarse por debajo de 2.840 dólares, y poner a prueba la media exponencial de 50 días en 2.715 dólares".
Dixit ha dicho que no cree que vaya a haber ningún salto importante en el precio del aluminio más allá del nivel de 3.000 dólares, al menos no hasta una corrección significativa que lo sitúe entre 2.500 y 2.300 dólares.
"Hemos adoptado una visión contraria a la confianza de la multitud", añade.
¿Pero qué pasaría si el aluminio desafiara la presión de venta y mantuviera intacta su tendencia alcista?
¿Cuál es el potencial entonces?
"La banda media de Bollinger, en 2.841 dólares, podría servir de apoyo a los precios del metal, y un movimiento sostenido por encima de 2.900 dólares podría dar lugar a una subida hasta los 3.006 dólares", afirma Dixit.
Una lectura de 7/22 del RSI estocástico significará que el aluminio ha entrado en territorio de sobreventa al menos a corto plazo y que podría producirse un repunte temporal".
Descargo de responsabilidad: Barani Krishnan utiliza una serie de puntos de vista aparte del suyo para aportar diversidad a su análisis de cualquier mercado. En pos de la neutralidad, presenta opiniones contrarias y variables de mercado. No tiene participaciones ni mantiene una posición en las materias primas o valores sobre los que escribe.