Las dudas sobre la profundidad y de la duración de la crisis económica postpandemia volvió a pesar AYER en el ánimo de los inversores, lo que provocó caídas en los mercados de renta variable europeos y estadounidenses. Los mercados de bonos de la Europa continental también sufrieron descensos, lastrados por los potenciales efectos negativos que en la independencia del BCE puede llegar a tener la reciente sentencia del Tribunal Constitucional alemán, en la que ponía en duda algunas de las actuaciones de la institución y en la que, incluso, daba un plazo de tres meses para que tanto el BCE como el Bundesbank justificaran la necesidad desde un punto de vista económico y fiscal de la puesta en marcha en 2015 del programa de compra de bonos conocido como PSPP. El castigo recibido por los bonos soberanos de la región, esta vez sin excepciones, provocó el alza de la rentabilidad de estos activos, mientras que las primas de riesgo se mantenían relativamente estables.
Así, y en un día en el que tanto los indicadores adelantados de actividad del sector servicios del mes de abril de la Eurozona, los conocidos PMIs, como las estimaciones de primavera de la Comisión Europea (CE) -proyecta una contracción del PIB de la Zona Euro del 7,7% en 2020- cayeron como un jarro de agua fría sobre unos inversores que ya tenían muchas dudas sobre el impacto económico real de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus de origen chino, los principales índices europeos volvieron a ceder terreno, lastrados por los valores/sectores de corte más cíclico, como los relacionados con el petróleo, los bancos, los automóviles y los de ocio y turismo. En sentido contrario, los valores más defensivos como los del sector de la sanidad o los de alimentación aguantaron mucho mejor, siendo de los pocos que cerraron el día con avances. En este sentido, hay que señalar que son las compañías de estos sectores las únicas que están siendo capaces de mantener sus expectativas de resultados para el presente ejercicio, mientras que la gran mayoría de las compañías cuyas actividades dependen directamente del ciclo económico se están viendo forzadas a retirar las suyas por falta de visibilidad.
En Wall Street la sesión también fue negativa, con los principales índices, Dow Jones y S&P 500, cerrando la jornada con pérdidas y con los inversores también preocupados por el impacto económico de la pandemia. Cabe destacar, no obstante, que el Nasdaq Composite, apoyado en los valores del sector tecnológico, los únicos que cerraron AYER al alza, fue capaz de terminar la jornada con un pequeño avance, aumentando de esta forma aún más la distancia con los otros dos índices en lo que hace referencia a su evolución en el ejercicio (-1,3% vs. -17% del Dow Jones y -12% del S&P 500). Es evidente que los inversores están viendo que el cambio en los hábitos de comportamiento de particulares y empresas que va a general la pandemia del coronavirus de origen chino se va a tener que apoyar en la tecnología y en la biotecnología, dos de los sectores que mejor están comportándose en bolsa en este complicado ejercicio.
Centrándonos en la sesión de HOY, cabe decir que esperamos que las bolsas europeas abran sin grandes cambios, en una sesión en la que la agenda macro incluye los datos de producción industrial de marzo de Alemania y Francia, que esperamos reflejen fuertes descensos, y el desempleo semanal en EEUU -se espera que unos 3 millones de personas adicionales hayan solicitado subsidio de desempleo la semana pasada-. Además, tanto en Wall Street como en las distintas plazas europeas continúa la temporada de publicación de resultados, con múltiples compañías dando a conocer los suyos. Así, y en la bolsa española, publican entre otras empresas Telefónica (TEF), Ferrovial (MC:FER), ArcelorMittal (MTS), IAG (MC:ICAG) y Acciona (MC:ANA (T:9202)). También en el ámbito empresarial, cabe destacar la noticia de que Telefónica (TEF) y Liberty Global (NASDAQ:LBTYA) han llegado a un acuerdo para crear una joint venture al 50% para integrar sus negocios en el Reino Unido, noticia que ya fue muy bien acogida por los inversores cuando se filtraron las negociaciones entre ambas compañías hace solo unos días.