Cuando se elabora una cartera de inversión para un horizonte temporal de medio plazo (varios meses), el análisis técnico ya no es suficiente, se requiere también del análisis macroeconómico.
La cartera de seis valores que propuse a primeros de enero se basaba precisamente en esto.
Escribí varios artículos explicando el porqué desde el punto de vista macro para apostar por esos seis valores, y posteriormente, meses después, utilicé el análisis técnico para ir afinando y calculando los stops ganadores.
Finalmente, se cerró hace pocos días, con una rentabilidad de +17,10% para la versión conservadora y +18,72% para la versión agresiva.
¿Y por qué cerrar una cartera a los 5 meses cuando era para el 2017? Dos consideraciones al respecto:
- Cuando se indica cartera para el 2017 no quiere decir que haya que mantenerla abierta del 1 de enero de 2017 al 31 de diciembre de 2017. De lo que se trata es de una cartera para gestionarla de manera dinámica durante el año, y serán multitud de factores y variables los que nos vayan indicando en cada momento qué hacer.
- Personalmente realicé poco antes de comenzar el año una valoración macro de los valores, atendiendo a diversos elementos. Los seis que escogí presentaban ratios desde mi punto de vista interesante, si bien es cierto que había un buen número de otros valores que tenían mejores guarismos, pero que me parecían más arriesgados por el sector al que pertenecían o por hechos que podían acontecer durante el año y que les podría generar incertidumbre.
En mayo, la mayoría ya habían alcanzado el precio objetivo que barajaba, por lo que opté por lo más sencillo para el inversor, asegurar una buena rentabilidad y a otra cosa.
¿Todo tranquilo? Sí, pero muchos frentes abiertos, demasiados para mi gusto. Varios mercados han vuelto a marcar hace poquito nuevos máximos históricos (Dax alemán, FTSE británica, S&P y Nasdaq norteamericanos), los niveles de sobrecompra se mantienen vigentes, las continuas meteduras de pata de Trump pueden hacer saltar por los aires todo el establishment, la Fed no tiene ya tan claro cuántas veces subir los tipos de interés, Inglaterra desafía a la UE con un hard brexit porque se niega a devolver lo que debe, el Gobierno de España tendrá difícil seguir adelante con el nuevo líder del PSOE y el adelanto de elecciones es una posibilidad real, etc, etc.
Muchas cuestiones por delante, muchos frentes abiertos que a día de hoy suponen un terreno inhóspito no exento de dificultades.