Los precios del cobre cotizaron estables el miércoles debido a que el cierre de la segunda mina del metal a nivel mundial apuntalaba los valores y contrarrestaba el impacto de unos datos que sugirieron que la economía de China, el mayor consumidor, tiene dificultades para mejorar.
La actividad en el sector de servicios de China creció el mes pasado pero a un ritmo que mostró pocos cambios frente al mes anterior, lo que se sumó a las preocupaciones tras conocerse un dato sobre el sector de manufacturas que mostró una pérdida de fuerza en la economía.
El mercado fue apuntalado por informes de que la mina Grasberg de Freeport McMoRan Copper and Gold Inc en Indonesia permanecería cerrada por hasta tres meses mientras el gobierno investiga el derrumbe de un túnel. Un cierre prolongado podría golpear la capacidad de Freeport de suministrar a sus clientes, así como los suministros globales de cobre.
Freeport no ha dicho cuánto pueden durar sus existencias del mineral, pero fuentes de la industria dicen que las mineras grandes suelen tener reservas para tres o cuatro semanas en los puertos, y alrededor de tres días en el sitio minero.
Aún así, analistas esperan que el mercado de cobre alcance un superávit este año y que la demanda china del metal se mantenga débil.
Los inversores han mostrado cautela antes del reporte mensual de nóminas no agrícolas en Estados Unidos que será divulgado el viernes, dado que la Reserva Federal ha dicho que una mejora en el sector laboral es una condición previa para reducir su masivo plan de compra de bonos.
Una disminución más pronto de lo esperado de las medidas de estímulo monetario por parte de la Fed podría socavar las materias primas, impulsando el dólar y agotando la liquidez disponible para los inversores.
Tras caer bajo el importante soporte de los 3,5 dólares la libra, el metal rojo ha estado cotizando bajo una fuerte presión vendedora que podría presionar al metal bajo el soporte de los 3,0 dólares la libra.