El EUR/USD ha repuntado significativamente esta mañana a medida que los mercados buscaban refugio después de los acontecimientos de esta noche.
El precio del petróleo ha caído por debajo de 30 dólares el barril. No parece que se haya un final en esta caída pronto, ya que la guerra de precios interna en la OPEP es obvia, y el crudo iraní aún tiene que llegar al mercado, a lo que se añade la caída de la demanda china.
El efecto inmediato ha sido una caída de las divisas de países productores de materias primas (CAD, RUB, NZD).
Los mercados de valores también han sufrido las consecuencias, arrastrados por las fuertes caídas de los stocks energéticos. El S&P 500 y el Nasdaq están en territorio de contracción (caída de más de un 10%) con respecto a los máximos del año pasado. Las fuertes caídas en Wall Street se han contagiado a los mercados asiáticos y europeos. El índice VIX, o el "calibre de miedo de la bolsa" se ha disparado un 11%.
Estas fluctuaciones se explican por la decisión de la Reserva Federal (Fed) de incrementar tipos de interés en diciembre, seguido de fuertes caídas de las bolsas en China y de los precios del petróelo. Estos efectos han creado un clima de inseguridad y miedo en los mercados financieros, en comparación con el similar episodio del pasado agosto.
Estos días se van a emitir los resultados empresariales del cuarto trimestre de 2015, por lo que se pueden ver más y más importantes fluctuaciones en divisas y valores, ya que las predicciones indican posibles caídas de las ganancias en general lo que podría activar un sentimiento de aversión al riesgo severo a partir del cual los mercados buscarían la protección de activos seguros.
