El apetito por el riesgo global sigue siendo inestable en vísperas de un jueves lleno de noticias. El S&P 500 cayó un 0,4%, mientras que los rendimientos del extremo largo de la curva de rentabilidad de la deuda pública estadounidense cayeron cinco puntos básicos; ambas caídas sugieren claramente que existe aversión al riesgo.
La preocupación en torno al ritmo del ciclo de ajuste de la Reserva Federal (Fed) y la baja inflación combinada con los riesgos generales asociados al sentimiento han permitido que el JPY gane casi el 4,50 % frente al dólar. Sin embargo, el otro gran par de refugio, el EUR/CHF, no se ha beneficiado de manera tan agresiva. El CHF sólo ha ganado un 1,30 % contra el EUR, lo que es sorprendente teniendo en cuenta el tamaño de los movimientos más amplios de divisas.
Una de las razones es que el Banco Nacional de Suiza (BNS) sigue activo en la gestión de cualquier apreciación del CHF (aunque las reservas de divisas del BNS cayeron marginalmente), mientras que la otra es que hay una expectativa creciente de que la era de una política poco ortodoxa del Banco Central Europeo (BCE) se dirige, aunque lentamente, a su fin. Existe una probabilidad cada vez mayor de que en la reunión del BCE de mañana, Draghi pueda dar el primer paso hacia la eliminación de la política monetaria emergente. Esto podría ocurrir con un cambio en las palabras sobre el balance de riesgo o indicando que es menos probable que la tasa de interés disminuya.
Pero para los inversores eso sería una señal tan clara como la terminación de las compras de activos o el aumento de las tasas de interés. Además, operar con EUR siempre viene acompañado de un riesgo político perpetuo y en la actualidad no es diferente.
Sin embargo, en el corto plazo el riesgo político europeo ha disminuido, lo cual disminuye la presión de la fuga de capitales. El sentimiento con respecto a la reducción del estímulo monetario del BCE debería aumentar el umbral de los riesgos sociales y políticos perjudiciales, y permitir que el EUR/CHF se aprecie constantemente.