El oro subió más de un 4 por ciento el miércoles a más de 1.360 dólares, su mayor avance diario desde junio del 2012, luego de que la decisión de la Reserva Federal de continuar con su ritmo de compras de bonos desatara compras de inversores que esperaban una reducción de los estímulos en Estados Unidos.
El oro al contado subió un 4,2 por ciento, a 1.364,01 dólares la onza. El metal se recuperó en unos 70 dólares, o un 5,5 por ciento, frente a mínimos de seis semanas de 1.291,34 dólares que alcanzó más temprano en la sesión.
El anuncio de la Fed de mantener por ahora las compras de 85.000 millones de dólares en bonos al mes ante las preocupaciones por el creciente costo de la deuda en Estados Unidos también sorprendió a los mercados financieros que anticipaban una reducción del estímulo económico.
La plata escaló casi un 7 por ciento antes de cerrar la sesión, su mayor avance diario desde noviembre del 2008.
Citando tensiones en la economía debido a la ajustada política fiscal y mayores tasas hipotecarias, la Fed decidió no recortar sus compras de activos, algo que los inversores habían anticipado en los precios de los bonos y las acciones.
En estos momentos, el metal dorado acaba de validar un importante soporte en la zona de los 1.300 dólares la onza, lo que podría gatillar fuertes órdenes de compra impulsando al metal en busca de la resistencia de los 1.500 dólares la onza.