Se acerca el final de 2019, de manera que es buen momento para echar la vista atrás y analizar cuál de las decisiones del año resultó correcta —y rentable— y cuál resultó ser incorrecta.
En el grupo de acciones tecnológicas de alto crecimiento conocidas como FAANG, las de Apple (NASDAQ:AAPL) son unas de las acciones que han sorprendido a muchos analistas con su fuerte impulso, ya que desafiaron el pesimismo de los posibles escenarios. Vale la pena echar un vistazo más atento para ver si esta tendencia continuará a medida que se acerca 2020.
Para Apple, 2019 fue un año extremadamente inquietante, ya que se ha enfrentado a un descenso de la demanda de su buque insignia, el iPhone, mientras que el entorno macroeconómico se volvía hostil después de que Estados Unidos y China se vieran envueltos en una larga guerra comercial. El 20% de las ventas de la compañía provinieron de China, donde también ha desarrollado una enorme red de proveedores, Apple se ha enfrentado a una amenaza directa para su negocio a causa de la perspectiva de un aumento de los aranceles y los rifirrafes de represalias.
Apple, que sigue siendo la mayor y más rentable empresa tecnológica del mundo, comenzó el nuevo año con un descenso del precio de las acciones de más de un 30% desde que registrara máximos históricos en agosto de 2018. A medida que avanzaba 2019, sin embargo, quedó claro que el gigante tecnológico del consumo ha hecho acopio de munición para hacer frente a la difícil situación provocada por la disputa comercial.
En nuestro análisis del 27 de marzo, recomendábamos encarecidamente comprar acciones de Apple ante este debilitamiento ya que, en nuestra opinión, el impulso de la compañía para expandir su negocio de servicios tendría éxito a medida que la compañía evolucionara y fuera dejando atrás su dependencia del iPhone.
Aunque las acciones cerraron ayer con pérdidas del 1,4% en 266,92 dólares, han subido más de un 40% desde marzo y más del 70% este año, superando a sus compañeros del FAANG, lo que incluye a Facebook (NASDAQ:FB), Amazon.com (NASDAQ:AMZN) y Netflix (NASDAQ:NFLX).
Algunos de los motores de estas fuertes ganancias han sido el gran interés suscitado por el iPhone 11 de la compañía y el optimismo de los inversores en que la política monetaria de China no perjudicará a Apple incluso aunque continúe la actual disputa comercial, debido a la contribución masiva de la compañía a la economía china.
Los teléfonos 5G serán un nuevo motor de crecimiento
En una nota a los clientes este verano, el analista de Bank of America (NYSE:BAC), Wamsi Mohan, explicaba que hay pocas probabilidades de que Apple quede atrapada en el fuego cruzado entre Estados Unidos y China. Al reevaluar los riesgos de China, los inversores vuelven a centrarse en la sólida cartera de productos de la compañía y su impulso para acelerar las ventas a través de su división de servicios.
El nuevo motor que volverá a impulsar la demanda de hardware nuevo es la implementación de teléfonos de quinta generación, o 5G, en 2020. Los analistas de Wall Street creen que la compañía volverá a registrar un crecimiento de los ingresos del iPhone en el año fiscal que concluye en septiembre de 2021. Las estimaciones de Wall Street en cuanto al impacto de los iPhone 5G sobre Apple son demasiado conservadoras, según Kyle McNealy, analista de Jefferies.
La última tendencia alcista de las acciones refleja también el éxito del director ejecutivo, Tim Cook, a la hora de diversificar los ingresos de Apple dejando atrás su dependencia del iPhone. Los servicios de la compañía, que incluyen Apple Music, alquiler de películas y descargas de aplicaciones, produjeron un crecimiento del 33% el año pasado, y las ventas ascendieron a 40.000 millones de dólares, lo que representa alrededor del 15% de los ingresos totales de la compañía de 265.600 millones de dólares.
En lo que va de año, esa tendencia continúa. En el cuarto trimestre, las ventas de su negocio de servicios aumentaron un 18%, mientras que las ventas de su negocio de wearables se elevaron un 54% gracias a la popularidad de sus auriculares inalámbricos AirPods. La compañía se está expandiendo gracias al impulso del entretenimiento tras el reciente lanzamiento del nuevo servicio de streaming Apple TV+.
Esa contribución seguirá creciendo una vez que arranque la nueva línea de servicios de la compañía (contenidos en streaming, Apple Pay y juegos). Según una estimación de Morgan Stanley (NYSE:MS), la contribución a los servicios continuará expandiéndose y podría generar alrededor del 60% de los ingresos de Apple en los próximos cinco años.
En conclusión
La actual subida de Apple está respaldada por las mejoras reales de los fundamentales y cierta reestructuración del riesgo que los analistas habían asociado con la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Seguimos recomendando la compra de acciones de Apple para inversores a largo plazo que quieran contar con un nombre técnico sólido en su cartera.