Esto es una estrategia de las autoridades americanas para impulsar su economía y favorecer su comercio exterior
En un artículo, que he leído recientemente en Bloomberg, se dice que a diferencia de lo que ocurría a final del año pasado, hoy la mayoría de los analistas y traders están de acuerdo de que el dólar tendrá que fortalecerse contra casi las principales contrapartidas.
Aunque estoy de acuerdo, no me gusta tanto consenso. Si todos coinciden, ¿por qué no se ha caído ya?
Sin ninguna duda, el dólar USA se puede considerar una divisa infravalorada si nos atenemos a fundamentales económicos: crecimiento, empleo , inflación…etc. No tanto en cuanto a los tipos de interés. La Reserva Federal ha mantenido los tipos de interés en niveles extraordinariamente bajos y promete mantenerlos durante mas tiempo aún. Así pues, la divisa norteamericana se encuentra en los mínimos contra las divisas de sus principales socios comerciales a pesar de que su economía ha dado ya señales claras de recuperación y aventaja en mucho a las de Europa y Japón, por ejemplo.
Que esto es una estrategia de las autoridades americanas para impulsar su economía y favorecer su comercio exterior, nadie lo duda, de hecho, el señor Bernanke no desperdicia la oportunidad de recordar a los participantes en el mercado que si fuera necesario siguen teniendo munición para seguir comprando bonos y bajar aún mas los tipos de interés a largo plazo.
Pero varios acontecimientos en los últimos días amenazan esta extrema debilidad del dólar, en cierta manera inducida por la Reserva Federal:
Por un lado, la creciente incertidumbre sobre el futuro del Euro. Cuando una país como España, el cuarto de la eurozona, empieza a tener problemas serios, las alarmas crecen, pero además otros dos, considerados del nucleo duro, Francia y Holanda, también pondrán contra las cuerdas en el futuro muy próximo, todos los planes de austeridad y estabilidad traídos de la mano de Alemania.
Pero hay otro que puede ser aún mas influyente. Las autoridades Chinas decidieron ampliar la banda de fluctuación de su divisa, el yuan, o lo que es lo mismo, dejaron que el mercado tuviera mayor autonomía para fijar el tipo de cambio. Este proceso irá creciendo hasta que se llegue a la libre flotación de esta divisa. En breve, y como consecuencia del retroceso claro en el crecimiento chino, veremos como bajan tipos de interés y reducen coeficientes de caja bancario. Esto, inexorablemente, llevará a un yuan más débil y presionará al dólar al alza.
Para esta semana, el Banco de Japón se reúne bajo una gran presión del Ministerio de Finanzas que le pide que tome medidas para debilitar el yen. El dólar viene de hacer mínimos recientemente contra la divisa nipona. Si de esta reunión salieran nuevos incrementos en las cantidades destinadas a compras de activos japoneses y los diferencias de los bonos volvieran a estrecharse a favor de los treasuries americanos, podríamos ser testigos de subidas importantes en el USDJPY.
Objetivo puede ser 84.50, por debajo las zonas de 81.05 y 80.70 actúan como soporte.
Miguel Ángel Rodríguez