El Fidelity Magellan Fund tuvo un rendimiento anualizado de más del 29% entre 1977 y 1990. Era la época en que el estratega jefe de la división de inversiones era Peter Lynch.
Siempre me han impresionado mucho las declaraciones y enseñanzas de este gran gerente.
Una de las cosas que más me impresionó fue su enfoque de los llamados factores macroeconómicos: me refiero a las tasas de interés, la inflación, la recesión.
Peter solía decir: «Si has dedicado más de 13 minutos al año a la economía, has perdido más de 10 minutos». De hecho, ignoró las tasas de interés y la inflación: y logró resultados excepcionales.
Viendo el impacto que tuvieron ayer en los mercados las palabras de Powell, se diría que los tiempos han cambiado evidentemente, o que el bueno de Peter Lynch se equivocó, a pesar de los beneficios obtenidos.
De hecho, el mercado ya se había adelantado a las decisiones de la Fed: y esto, tras el gran rebote de 4060, calificado en el artículo de anteayer como una obra maestra de la institucional, produjo la confirmación de esa aceleración alcista.
El 18 de abril, nuestro sistema predijo una reversión alcista. En el S&P 500, fue solo un fuerte repunte de tres días a 4500 (esperábamos al menos 4600, no fue así). A partir de ahí el mercado bajó hasta el mencionado 4060.
Ahora está a mitad de camino de los 4300: el precio tocó esa zona los días 22, 25, 26 y 28 de abril. En las últimas tres veces con un intento alcista de romper la resistencia, un intento fracasó. Por lo tanto, el de ayer es un cuarto ataque, y podría ser el momento adecuado.
Es difícil decir si se trata de una reversión alcista o de otro rebote en la tendencia bajista formada a partir del 5 de enero.
Nunca hemos ocultado que a pesar de que llevamos meses hablando de un 2022 muy complicado, y con mucha antelación, creemos que a final de año lo más probable es que estemos en la zona alta de el mercado en lugar de en la zona inferior.
Estacionalmente, tuvimos un abril catastrófico como no se había visto en muchos años.
A pesar de la dicha vender en mayo, las estadísticas de mayo sobre el S&P500 no son negativas: la media de los resultados a 30 años la da ligeramente positiva. Mayo tiene muy mala reputación por dos motivos: por haber tenido algunos deslices importantes en algunos años y por ser el comienzo del periodo menos favorable del año para las subidas bursátiles.
El ciclo favorable se reanudará en noviembre, mes de las compras, para finalizar en abril, mes (según las estadísticas) de máximos o en todo caso de excelente desempeño.
¿Qué nos dará mayo en este 2022?
Tendemos a decir que estamos razonablemente seguros de un regalo: una volatilidad significativa y sostenida, e incluso algunas sorpresas a la vuelta de la esquina. Si es un rebote, ¿caerá más el S&P500 y llegará a 3800 como predicen algunos? Primero tiene que romper 4100 (esta vez en serio) y luego 3975-3950. Sigo siendo escéptico al respecto, pero cualquier cosa puede serlo.