En una sesión de continuas idas y vueltas, los principales índices bursátiles europeos cerraron en su mayoría con ligeros descensos, en una sesión que sirvió para consolidar los fuertes avances de la semana pasada. Así, y en una jornada sin grandes referencias, los inversores optaron por reducir algunas posiciones de riesgo, apostando nuevamente por los bonos, lo que propició una ligera caída de sus rentabilidades. Los sectores más destacados del día fueron el bancario, animado por los continuos rumores sobre operaciones corporativas -AYER se supo que el BCE había autorizado la compra de UBI Banca (MI:UBI) por Intesa Sanpaolo-, rumores que sirvieron para impulsar al alza las cotizaciones de los bancos medianos españoles, y el del petróleo, tras conocerse que el pasado fin de semana la OPEP+ había alcanzado un acuerdo para prorrogar hasta julio los recortes de producción en vigor.
Por lo demás, y en el ámbito macroeconómico, cabe destacar la publicación en Alemania de las cifras de la producción industrial del mes de abril, cifras muy negativas como era de esperar, al estar condicionadas por las medidas de cierre forzoso de actividad implementadas por el Gobierno alemán para combatir la pandemia del coronavirus de origen chino. Pero estas cifras son “pasado”, por lo que consideramos más interesante la mejoría experimentada en el mes de junio por el índice de sentimiento inversor de la Zona Euro, que elabora la consultora Sentix, especialmente en su componente de expectativas. No obstante, y a pesar de la sustancial mejora del índice general y de los subíndices de situación actual y expectativas, creemos que, como explica la propia consultora, a pesar de que con toda probabilidad la recuperación económica se ha iniciado en mayo/junio en la Zona Euro, se está lejos de poder garantizar una tendencia definitiva en este sentido. En nuestra opinión, los próximos meses son claves para que la recuperación se consolide y para que el escenario optimista que están comenzando a descontar los mercados se pueda cumplir, al menos en gran medida. De momento los inversores siguen viendo el “vaso casi lleno”, algo que se refleja en la fuerte recuperación que han tenido en las últimas semanas los precios de los activos de mayor riesgo, como ha sido el caso de la renta variable.
Pero si en Europa se impusieron las ventas, en Wall Street continuó la euforia de la semana pasada, lo que llevó AYER al S&P 500 a ponerse nuevamente en positivo en el año, mientras que el Nasdaq Composite, cuya recuperación en las últimas semanas ha sido en forma de “V”, marcó AYER un nuevo récord histórico, todo ello mientras que The National Bureau of Economic Research anunciaba que formalmente la economía estadounidense había entrado en recesión en el mes de febrero tras 11 años de expansión económica. No obstante, los inversores vieron este anuncio como algo del pasado, apostando nuevamente porque esta será una de las recesiones más cortas de la historia.
En principio, y a la espera de conocer qué dice y hace la Reserva Federal (Fed) MAÑANA cuando finalice la reunión de dos días de su Comité de Mercado Abierto (FOMC), creemos que los mercados de valores europeos y estadounidenses mantendrán el buen tono que han venido mostrando últimamente. Así, y siguiendo el buen cierre de AYER de Wall Street, esperamos que HOY las bolsas europeas abran nuevamente al alza. No obstante, y como ya hemos comentado en algunas ocasiones, existe la posibilidad de que el escenario de rápida recuperación económica que descuentan en la actualidad los mercados no se cumpla, especialmente en algunos países de la Zona Euro. AYER mismo, sin ir más lejos, tanto el Banco de España (BdE) como el Instituto Nacional de Estadística de Italia (ISTAT) revisaron a la baja sus expectativas de crecimiento económico para ambos países, dando a conocer un cuadro macro bastante negativo, algo que, en nuestra opinión, no parecen estar teniendo en cuenta los inversores en estos momentos de euforia.