Los inversores en Rivian Automotive (NASDAQ:RIVN) han visto truncada la espectacular subida que comenzó tras la exitosa salida abolsa del fabricante de coches eléctricos la semana pasada.
Sus acciones se han desplomado más de un 20% en los últimos dos días, tras la subida de cinco días que ha hecho que sus acciones suban un 121% frente al precio de OPV de 78 dólares. En un momento dado, la oleada de compras posterior a la OPV elevó la valoración de Rivian por encima de casi el 90% de las empresas del S&P 500, incluidos valores como Boeing (NYSE:BA), Starbucks Corp (NASDAQ:SBUX). y Caterpillar (NYSE:CAT).
Este tipo de volatilidad de las acciones de vehículos eléctricos no es una tendencia nueva. El líder del mercado, Tesla (NASDAQ:TSLA), ha pasado por múltiples períodos de auge y caída durante los últimos cinco años. Las acciones de Tesla se han visto sometidas a una presión extrema desde que Elon Musk realizara una encuesta en Twitter (NYSE:TWTR) a principios de este mes en la que preguntaba a los votantes si debía vender el 10% de su participación en la empresa, y atendió a los resultados con una serie de ventas de acciones.
La mayor incertidumbre que se cierne sobre las empresas de vehículos eléctricos son sus elevadísimas valoraciones, difíciles de justificar por cualquier motivo. Rivian —con el respaldo de algunos inversores de alto nivel, como Ford (NYSE:F), Amazon (NASDAQ:AMZN) y el gestor de activos T. Rowe Price Group— tiene que demostrar rápidamente que está a la altura de las expectativas de los inversores.
Rivian planea utilizar los 12.000 millones de dólares recaudados en la OPV para ampliar la producción de su fábrica y acelerar el desarrollo de futuros modelos de vehículos. En julio, Reuters informaba de que Rivian planeaba invertir 5.000 millones de dólares en una segunda planta de montaje. La empresa afirma que su actual fábrica de Illinois puede producir hasta 150.000 vehículos al año.
Participación del 20% de Amazon
Amazon, que en 2019 se hizo con una participación del 20% en la compañía, se convirtió en el mayor comprador de vehículos Rivian cuando su fundador y director ejecutivo, Jeff Bezos, encargó 100.000 furgonetas eléctricas de reparto Rivian para su negocio de logística.
Rivian está desarrollando una camioneta eléctrica —R1T— y un SUV —R1S. Empezó a entregar algunas camionetas en septiembre, la mayoría a sus propios empleados. Calcula que la producción anual de su planta principal alcanzará los 150.000 vehículos a finales de 2023.
"Hemos construido una plataforma que es increíblemente escalable", ha afirmado el director ejecutivo de Rivian, R.J. Scaringe, este mes en una entrevista para Bloomberg Television. La "plataforma nos ha permitido avanzar realmente rápido en la construcción de la parte comercial de nuestro negocio, y nuestro primer cliente ha sido realmente un buque insignia, con Amazon y su pedido inicial" de furgonetas.
Es probable que la demanda de vehículos eléctricos siga siendo fuerte, impulsada por las subvenciones gubernamentales para promover las tecnologías limpias. El presidente de Estados Unidos, Joseph Biden, tiene previsto destinar miles de millones de dólares a la construcción de una red de estaciones de recarga de vehículos eléctricos como parte de su último gasto en infraestructuras.
Además, Rivian, con sede en Irvine, afirma que el mercado de los vehículos eléctricos ascenderá al menos a un billón de dólares en 2025 y crecerá exponencialmente en una década.
Hay muchas posibilidades de que Rivian se convierta en un actor de éxito en el mercado de los vehículos eléctricos debido a su importante liderazgo en el mercado de las camionetas con baterías. Pero los inversores también deben tener en cuenta que a la empresa le queda un largo camino por delante para salvar la brecha entre las expectativas y los fundamentales.
El aumento de la producción ha sido siempre la parte más arriesgada del ciclo de vida de una empresa, y a Rivian le quedan muchos años para llegar a esa fase. A modo de comparación, Tesla tardó una década en escalar y ofrecer su primer año completo de beneficios.
Conclusión
Los inversores encontrarán un punto de entrada mucho mejor para comprar acciones de Rivian y participar en esta historia de potencial crecimiento de los vehículos eléctricos. En este momento, existe un mayor riesgo de perder dinero tras el bombo inicial de la OPV. En nuestra opinión, esperar al margen es mejor estrategia para los inversores a largo plazo.