El dólar se desplomó la pasada semana, particularmente el viernes luego de conocerse las novedades de la cumbre europea y marcó nuevos mínimos para el mes frente a varios rivales. Técnicamente se dieron importantes quiebres que podrían señalar la continuidad de la caída del billete verde, aunque las dudas siguen desde el punto de vista fundamental. La desaceleración económica continúa en el mundo, la crisis europea no se acabó y se viene una semana cargada donde todo puede cambiar (varias veces).
El dólar, la peor. Se trató de una semana donde la mayoría de los cruces se movieron en rangos a la espera de lo que podría acontecer en Europa. Luego de conocerse las noticias, el dólar se desplomó en el mercado y el euro recuperó terreno perdido.
La suba en las bolsas, que tuvieron la mejor semana en meses también contribuyó a la caída del dólar y a aumentar la demanda de monedas ligadas a commodities.
EUR/USD: El cruce cerró la semana y el mes en positivo pero aún técnicamente en gráficos mayores se encuentra dentro de una tendencia bajista. En el corto plazo, el optimismo parece venir por el lado fundamental pero para que se ratifique técnicamente en las siguientes sesiones el par deberá trepar y consolidarse por encima de 1,27, lo que sí habilitaría una mayor apreciación. Un regreso por debajo de 1,2550, removería gran parte de la actual fuerza alcista.
GBP/USD: La libra logró sostenerse por encima de una línea de tendencia alcista en gráficos mayores con origen en el 2009, lo que le está dando soporte. Al igual que el EUR/USD se apreció con fuerza la pasada semana. Para continuar con el rally alcista, es necesaria una consolidación por encima de 1,5740 lo cual abriría las puertas a una suba hasta 1,59.
USD/JPY: Sobre el final de la semana, el dólar recuperó parte de las pérdidas. El par logró regresar por encima de una línea de tendencia de corto plazo, pero se topó con resistencia cerca de 80,00; por encima de dicho nivel el dólar podría acelerar la subida. Aunque no pareciera, el par cerró el mes con ganancias, tras haber caído con fuerza en los dos anteriores. Las señales de los principales indicadores no son claras, ni tampoco el panorama para este cruce.
En general, desde el aspecto fundamental, si sigue el optimismo, entonces el yen debería seguir derrapando a lo largo del mercado, particularmente frente a las monedas ligadas a commodities.
Anuncios impulsan al euro. Los anuncios de la cumbre europea impulsaron al euro ya que se alcanzó mucho más de lo previsto. Sin embargo, por ahora son anuncios que se tienen que hacer realidad. Todo lo acordado sirve para ganar tiempo. Esta vez fue mucho tiempo, que solamente servirá si el crecimiento regresa a la región. De lo contrario, habrá que esperara más cumbres.
Un aspecto indirecto del acuerdo positivo es que remueve ciertas incertidumbres que existían. Como fue mencionado antes, el principal problema actual en Europa no es la deuda, sino la falta de crecimiento. Otro aspecto positivo de la cumbre es que no se habló excesivamente de ajuste fiscal y que por un tiempo parece que no habrá nuevas rebajas en las notas crediticias de los países de la región. En lo que respecta al mercado de divisas, la duda es si los anuncios impulsarán al euro en el mercado en el mediano plazo. Por ahora sí, pero los anuncios pueden que sirvan por poco tiempo. Otro aspecto positivo de la semana se dio en Grecia, donde la salida de depósitos bancarios se frenó.
Desde el punto de vista técnico, frente a la libra (EUR/GBP) y contra las monedas ligadas a commodities (EUR/AUD, EUR/NZD y EUR/CAD) el euro se apreció con fuerza y removió cierta presión bajista de corto plazo, pero la tendencia dominante en gráficos mayores sigue siendo bajista. Es decir, que aún no estamos en un punto de inflexión mayor. Para esto deberíamos de ver una mayor apreciación del euro en los próximos días.
Panorama positivo para monedas ligadas a commodities, aunque con neblina. El kiwi, al aussie y el loonie subieron en el mercado impulsadas con fuerza el viernes, en una ambiente dominado por el optimismo. Esto dejó la sensación de que fue toda una semana con subas, aunque no fue así. Todo se desarrolló el viernes, que llevó a que estas monedas quiebren importantes niveles contra el dólar y tengan el cierre diario más alto desde principios de mayo. Esto implica que técnicamente la perspectiva sigue siendo positiva en el corto plazo y han quedado cerca de habilitar mayores subas, para esto deberán tener nuevos avances pronto.
La niebla se suma con el panorama fundamental. Los datos desde China siguen mostrando desaceleración, en Europa (pese a los anuncios) la crisis sigue y en EE.UU. siguen dominando las sorpresas negativas en cuanto a datos económicos. Desde China lo positivo es que la inflación seguiría en descenso posibilitando nuevas medidas de estímulo por parte del banco central, lo que podría darle empujones al kiwi y al aussie.
Otro impulso importante que recibieron estas monedas fue la gran suba de las commodities. La estrella principal fue el petróleo, que se disparó el viernes saltando desde debajo de $80 el barril, hasta $85.
Semana clave. Esta semana será importante y estará marcada con ciertas decisiones, que influenciarán seguramente en el mercado de divisas. El BCE y el Banco de Inglaterra se espera que hagan nuevos anuncios. Además habrá reportes económicos de los más movedores, incluyendo entre estos el informe de empleo de EE.UU. del viernes. Otro dato que moldeará la semana serán los reportes de China y el mismo lunes, tendremos los PMI de las principales economías del mundo. Pese al feriado en EE.UU. será una semana cargada.