Un error de novato muy típico suele ser pensar que los traders profesionales sólo operan intradia o hacen day trading, pero nada más lejos de la realidad, existen otras fórmulas intermedias que nos pueden ayudar a mantener los nervios, los beneficios y hacernos la vida mucho más fácil… El swing trading hace tiempo que llegó y lo hizo para quedarse.
Como ya he comentado en otras ocasiones, cada tipo de operativa tiene sus características específicas, que a su vez requiere de ciertos atributos específicos que si no los tenemos “de serie” deberemos trabajar y desarrollar. Una de nuestras tareas como aspirantes a traders de éxito es encontrar la operativa que mejor se adapte a nuestra personalidad o a nuestras cualidades “naturales”, para así sentirnos más cómodos operando y de esta manera empezar a ser rentables (o no perder) lo antes posible.
Recordemos que ser operador intradíario o day trader es hacer toda la operativa en el mismo día, es decir, nuestra intención inicial será abrir y cerrar nuestras operaciones en el mismo día. Este tipo de operativa requiere exclusivamente del uso de análisis técnico para crear nuestras estrategias de entrada y salida al mercado, utilizando gráficos de 1 minuto, 5 minutos e incluso 15 minutos y sin olvidarnos de la correcta gestión monetaria y del riesgo.
Sin embargo el swing trading se irá un poco más lejos en plazo, es decir, las operaciones que abramos, aunque ocasionalmente pueden llegar a abrirse y cerrarse en el mismo día, buscaran plazos algo mayores. Generalmente, el plazo será de varios días, aunque en ocasiones nuestras operaciones pueden permanecer abiertas durante más de una semana, pero como es habitual en los mercados financieros, todo dependerá de muchas variables, principalmente, de la volatilidad.
Características:
Para este tipo de operativa el análisis técnico será también la voz predominante a la hora de elaborar nuestras estrategias de entrada y salida al mercado. Sin embargo, el análisis fundamental ya empezará a tener algo más de protagonismo, es decir, podemos elaborar nuestra estrategia mediante el análisis técnico, aunque si lo deseamos también nos podremos apoyar en algún dato fundamental de relevancia.
El swing trading utilizará gráficos de temporalidades mayores a los de la operativa intradiaria, aunque en este caso dependerá mucho del trader. Generalmente se utilizarán los gráficos de 1 hora, 4 horas e incluso diarios.
Ventajas:
- A efectos prácticos, salvando las diferencias comentadas en el párrafo anterior y en lo que se refiere a los aspectos técnicos, el swing trading y la operativa intradia son bastante similares. La gran diferencia la notaremos en el psicotrading. Mientras que la gestión emocional operando intradía puede llegar a ser “desquiciante” con todo lo que eso implica, en el swing trading las cosas se perciben más lentamente. Es por este importante detalle que tendremos mucho más tiempo para realizar cualquier aspecto de la operativa: entrar al mercado, hacer cierres parciales, totales, subir los stop loss a break even, decidir qué hacemos con las operaciones abiertas, etc.
- Por lo comentado anteriormente, nuestros niveles de estrés y ansiedad serán mucho más bajos, lo que supone vivir con más calidad de vida y también menos errores a la hora de operar.
- Nos mantendremos mucho más alejados de los temibles y odiados “come-stops” o HFT (trading de alta frecuencia), lo que implica que estadísticamente mejorará nuestro índice de acierto.
Desventajas:
- A grandes rasgos, la peor serían los gaps. Operando intradiariamente no tendremos gaps (o huecos en la cotización) ya que al abrir y cerrar las operaciones en el mismo día, los huecos en las cotizaciones que se puedan dar generalmente serán irrelevantes. Sin embargo en el swing trading, al dejar las operaciones para el día o días siguientes, si se pueden dar gaps en las aperturas de mercado.