Nuestro motor principal para la valoración de los activos macro en los últimos cinco años ha sido que la política acomodaticia de los bancos centrales de todo el mundo apoya la toma de riesgos.
Brexit, Trump y el terrorismo, debido a su gran impacto, pueden alejar a los inversores del capital barato. Si la perspectiva de ruptura de la mayor unión económica mundial en 2 días (la activación del Reino Unido del artículo 50) provoca una estampida de pánico de aversión al riesgo, ¿qué generaría la perspectiva de un bloqueo político en Estados Unidos? Advertimos a los inversores de no quedarse atascados en los titulares de transición y que una retirada forzada no estructural (las estimaciones de riesgo son altas) es una oportunidad para cambiar a posiciones largas.
Los índices bursátiles de Asia revirtieron la caída de Estados Unidos, lo que indica que los operadores ya han superado el asunto de Trump. Una debilidad adicional en la curva de rendimiento de los bonos de EE.UU. ha ayudado a respaldar la toma de riesgos (los bonos de EE.UU. a 10 años se estabilizaron en 2,37 %). El USD ha estado más débil contra la mayoría de las monedas de los mercados emergentes, especialmente el RUB y el MXN, mientras el presidente de la Fed de Chicago, Evans proporcionó un tono moderado (algo que no sorprende). El funcionario Indicó que el fracaso del proyecto de ley sobre la derogación del Obamacare aumenta la incertidumbre y naturalmente disminuye las expectativas de un alza de tasas por parte de la Fed.
Este nuevo ciclo pone de relieve el riesgo de perseguir la volatilidad en lugar de seguir a rajatabla el motor principal. En la agenda de hoy, dos conocidos funcionarios de línea dura, Kaplan y George, mantendrán vivas las esperanzas de un alza en junio. Seguimos siendo optimistas sobre el riesgo a pesar de la evidencia de una venta exagerada del USD, viendo la oportunidad de cosechar las operaciones de carry trade como una justificación para participar en generadores de rendimientos más altos (con un riesgo macro limitado). La única excepción serían nuestras operaciones cortas en EUR/CHF, para el cual se espera una mayor caída, colocando al BNS en una situación muy difícil.