La naturaleza a corto plazo del mercado en época de vacaciones volvió a evidenciarse el día miércoles. En este sentido, el volumen de operaciones siguió disminuyendo. El EURO se encontró comerciándose rápidamente en baja con respecto al DOLAR. La LIBRA y el DOLAR AUSTRALIANO siguieron la evolución de la divisa única y perdieron valor frente a su par estadounidense. El YEN también perdió algo de terreno, pero se mantuvo dentro de un rango bastante afinado. Los resultados del nuevo programa de préstamos del Banco Central Europeo, el cual permitió a los bancos pedir préstamos baratos de dinero por un periodo de 3 tres con tasas de interés cercanas a cero, ayer demostró tener éxito, de hecho, demasiado éxito. Según se informó, los bancos europeos pidieron prestado casi medio trillón de euros el día miércoles, lo cual encendió las alarmas de varias oficinas de inversión a nivel mundial. Por otro lado, las cifras del Existing Home Sales publicadas en los Estados Unidos resultaron negativas, perdiendo no sólo su marca mensual, sino obteniendo revisiones a la baja de informes que datan de 2007.
El hecho es que el Banco Central Europeo prestó una gran cantidad de dinero a los diferentes bancos, en un esfuerzo por crear mejores condiciones de liquidez. En este sentido, es dudoso que estos bancos utilicen el dinero para algo más que crear estabilidad para sí mismos. Así pues, cabe preguntarse qué va a pasar, si y cuándo la deuda soberana de varios países, como por ejemplo Grecia, tienen que ser canceladas. Otra pregunta por demás evidente es cómo obtuvo el BCE medio trillón en efectivo para prestar. ¿El BCE imprimió, de hecho, dinero? ¿O acaso vendió oro? Actualmente, los inversores enfrentan volúmenes extremadamente bajos de comercio, por lo que se les recomienda considerar, una vez más, la magnitud de los problemas que deberá afrontar Europa en el Año Nuevo. De hecho, el EURO perdió las mejoras alcanzadas en las dos sesiones previas, por lo que se recomienda seguir con especial atención su evolución durante la jornada de hoy.
Para hoy se espera que el volumen de operaciones siga mermando y, de hecho, mañana casi se desvanecerá por completo a medida que pasen las horas. Luego, básicamente el mercado permanecerá cerrado por un largo fin de semana, dado que varios países celebrarán la Navidad. Posiblemente los inversores retornen el próximo martes, pero la mayoría no lo hará hasta después de la primera semana de enero. La baja en el volumen de comercio generará rangos sumamente calmos, pero no se puede perder de vista el hecho de que con el más mínimo impulso podrían generarse repentinos estallidos de energía. El DOLAR mantiene intacto su estatus de refugio seguro y no se prevén cambios para los próximos meses.
Hoy en Norteamérica se darán a conocer el Unemployment Claims semanal, las cifras finales del PBI y el Sentimiento del Consumidor elaborado por la Universidad de Michigan y mañana se publicará el Core Durable Goods Orders. Sin embargo, hay que recordar que varios inversores prefirieron “abandonar sus puestos”, por lo que estos informes podrían no causar grandes impactos. Cabe señalar que desde esta mañana el oro se está comerciando en torno a los 1610.00 dólares la onza. El metal precioso se alejó de sus máximos a corto plazo con rapidez, cuando el EURO comenzó a enfrentar nuevas presiones.
La clave para el comercio en los días festivos es seguir las tendencias a corto plazo. Los operadores deben tener en cuenta que los valores están tratando de encontrar contrapesos bajo estas condiciones y que no todos los rangos tienen sentido. De todos modos, se les recomienda aprovechar del bajo volumen de comercio en este mercado bastante calmo, sin dejar de ser conscientes de que pueden darse fluctuaciones repentinas.