El teatro político Rusia-Ucrania y el probable recordatorio de la OPEP de que no cumplirá con sus objetivos de producción deberían mantener los precios del crudo en —o cerca de— 90 dólares por barril esta semana, ya que persiste el ansia de comprar petróleo por séptima semana consecutiva.
En el caso del oro, el reto consistirá en no alejarse de la marca clave de los 1.800 dólares, pues Goldman Sachs (NYSE:GS) ha dejado caer que podría haber hasta cinco subidas de tipos en Estados Unidos este año, en lugar de las tres o cuatro esperadas. El presidente de la Reserva Federal de Atlanta, Raphael Bostic, también ha dicho este fin de semana que algunas subidas de tipos podrían ser de hasta medio punto porcentual, frente a las previsiones que hablaban de subidas de un cuarto de punto porcentual como mucho.
El petróleo ha vuelto a abrir al alza la jornada este lunes en Asia, camino de una ganancia media en enero del 16% para el crudo de referencia mundial Brent, que cotiza en Londres, y para el West Texas Intermediate (WTI) de Nueva York, de referencia para el crudo estadounidense. Ésta supone la mayor subida media de los precios del petróleo en un mes desde febrero de 2021.
"La conclusión es que todo lo que veo me dice que el petróleo podría subir mucho más", decía Scott Shelton, broker de futuros de crudo en ICAP en Durham, Carolina del Norte, antes del fin de semana.
"Los refinadores podrían querer hacerse con los barriles a este precio... los márgenes lo justificarían".
Sin embargo, Shelton añade que cree que "un precio plano más bajo es más adecuado ahora mismo", sugiriendo un rebasamiento de los precios del crudo.
El viernes, los precios del crudo registraban una sexta victoria semanal consecutiva, con el Brent de referencia mundial alcanzando nuevos máximos en 90,25 dólares. El Brent ha subido ya un 15% en lo que va de enero.
El WTI registraba máximos de siete años el viernes, en 88,84 dólares. El crudo de referencia estadounidense ha subido un 17% en enero.
El repunte del petróleo de la semana pasada se vio impulsado de nuevo por las tensiones en Europa del Este, por cortesía del conflicto entre Rusia y Ucrania, y registró nuevos máximos después de que la concentración militar de Moscú cerca de Ucrania se ampliara para incluir los suministros de sangre que le permitirían tratar a las víctimas. Éste ha sido otro indicador de la preparación militar del Kremlin de cara al conflicto, según han dicho tres funcionarios estadounidenses a Reuters.
Petróleo: El drama de la OPEP+ se suma al de Ucrania
Esta semana, la OPEP+ se prepara para su reunión mensual del 2 de febrero. La OPEP+, formada por 26 países, está liderada por Arabia Saudí —que dirige la Organización de Países Exportadores de Petróleo original de 13 miembros— y Rusia, que dirige un grupo de otros 10 países no miembros de la OPEP en la que se incluye.
Desde finales de 2020, la OPEP+ ha aprovechado todas y cada una de sus reuniones para impulsar los precios del petróleo hablando de recortes de producción o de incapacidad para satisfacer la demanda. Estas últimas semanas, los medios de comunicación del sector energético se han visto saturados de noticias sobre la incapacidad de los exportadores de petróleo de la alianza para aumentar la producción debido a las limitaciones de capacidad de los yacimientos petrolíferos en los que no se ha invertido.
En su reunión del 2 de febrero, es probable que la OPEP+ mantenga el aumento previsto de su objetivo de producción de petróleo para marzo, según han comunicado a Reuters varias fuentes de la OPEP+. Pero el objetivo de aumento de la producción no importa si sigue existiendo la percepción de que la alianza simplemente no es capaz de bombear más.
Pero la OPEP+ también es culpable de calificar de "equilibrado" un mercado que estaba claramente desabastecido, dice John Kilduff, socio fundador del fondo de cobertura energético neoyorquino Again Capital. Se refería a la negativa de la alianza a aumentar considerablemente la producción el año pasado, cuando tenía mejores medios para hacerlo. Entonces, la OPEP+ rechazó los llamamientos de Estados Unidos, China e India que instaban a incorporar más barriles al mercado, ya que estas economías experimentaban una dinámica de recuperación tras la pandemia del coronavirus. La excusa de la alianza entonces era que los mercados petroleros estaban "equilibrados".
"La OPEP+ afirmó que el mercado del petróleo estaba equilibrado, pero se aseguró de que nunca alcanzara el equilibrio, porque el verdadero equilibrio podría significar que el petróleo se situara en 60 dólares, no en 90", dice Kilduff.
De hecho, algunos analistas prevén una grave escasez de petróleo este año. El columnista de Reuters John Kemp es uno de ellos, y señala que las reservas ya son escasas y que hay poca capacidad de reserva mundial para impulsar la producción a corto plazo.
ANZ Research también afirma que su investigación muestra un mercado deficitario, con reservas muy bajas. Añade que "las limitaciones del suministro probablemente inducirán una prima de riesgo considerable" a medida que se recuperen los viajes aéreos, especialmente en Europa.
El oro va camino de registrar pérdidas en enero
El oro, por su parte, va camino de una pérdida mensual de algo más del 2% al cierre de las negociaciones de enero.
El contrato más activo de futuros de oro del COMEX de Nueva York, el de febrero, sube 2,30 dólares, o un 0,1%, hasta 1.787,20 dólares por onza en el momento de redactar estas líneas.
Sin embargo, durante las tres jornadas anteriores al viernes, el contrato de futuros de oro de referencia cayó casi 70 dólares, lo que supuso una pérdida semanal de más de un 2%, lo que se tradujo en un rendimiento inferior en enero. A principios de la semana pasada, el contrato del COMEX del mes anterior superaba los 1.854 dólares, su cota más alta desde noviembre, atravesando de forma convincente el nivel de resistencia de 1.830-1.835 dólares.
La posterior caída de tres días lo ha llevado de nuevo por debajo de ese nivel de resistencia, lo que hace que sea un muro más difícil de escalar para el oro.
Sunil Kumar Dixit, estratega técnico jefe de skcharting.com, ha dicho que la acción del precio a lo largo de la semana refleja que el próximo movimiento del oro dependerá en gran medida de la reacción del mercado al nivel de 1.780 dólares, ya sea un punto que retener o que dejar atrás.
"Dejar atrás y mantenerse por debajo de los 1.780 dólares ampliará el impulso bajista, exponiendo la vulnerabilidad hacia los 1.768 y los 1.735 dólares", añade Dixit.
Descargo de responsabilidad: Barani Krishnan utiliza una serie de puntos de vista aparte del suyo para aportar diversidad a su análisis de cualquier mercado. En pos de la neutralidad, presenta opiniones contrarias y variables de mercado. No tiene participaciones ni mantiene una posición en las materias primas o valores sobre los que escribe.