El tiempo y la actual situación geopolítica mundial parecen darle la razón a Goldman Sachs respecto al rendimiento del mercado de materias primas, sobre las que se mantiene una visión "neutral" de cara a los próximos doce meses desde el pasado 28 del mes de julio.
Las materias primas medidas por el índice S&P GSCI, referencia clave si se quiere invertir en este mercado, han repuntado un 2,4%, frente al mercado de renta variable que avanzó un 5,6%, mientras los bonos del Tesoro de EE.UU. se revalorizaron un 3,5% en lo que va de año.
No obstante, pese a las dificultades que están atravesando gran parte de las materias primas ante los superávits de producción vistos en los últimos meses, productos como el níquel, el zinc, el aluminio o el paladio cuentan con el apoyo que les ofrece tanto una mayor respuesta de la demanda respecto al resto, como la percepción de escasez de abastecimiento de cara a los próximos 3 años.
Del lado contrario, el exceso de suministros afecta de forma negativa al cobre, el mineral de hierro, petróleo y soja, ya que se prevé que entren en superávit este año.
Tal y como considera Barclays, los metales industriales muestran las mejores perspectivas a corto plazo. Entre las recomendaciones del banco británico destaca la compra de níquel y la venta de oro, a pesar de que el metal dorado ha repuntado un 9,1% en poco más de siete meses.
Por su parte, Morgan Stanley también espera que el níquel, el zinc y el paladio continúen repuntando en 2014, y aunque el níquel "quizá haya sido sobrecomprado," la escasez del metal en 2015 ayudará a mantener intacta su tendencia alcista.
Por otra parte, según se intensifique la escasez de suministros, el zinc seguirá protagonizando un comportamiento superior al mercado, mientras el paladio cuenta con el apoyo de fundamentales sólidos respecto a oferta y demanda.
Del mismo modo, el fuerte avance de la construcción de viviendas en Estados Unidos, que ha alcanzado su nivel más alto en ocho meses en julio, ha reforzado la especulación sobre una aceleración de la demanda en el segundo mayor consumidor de metales industriales del mundo después de China, favoreciendo subidas la semana pasada en los precios del aluminio y el zinc.
El zinc se utiliza en productos para el hogar incluyendo piezas de fontanería de latón y en electrodomésticos, mientras que el aluminio se usa en elementos de construcción como estructuras o fachadas.
Pese a que no todas las firmas de análisis comparten la misma visión sobre el interés de los inversores en los productos básicos en general, casi todas recomiendan reducir la exposición en metales preciosos como el oro.
Tal como confirmó el Consejo Mundial del Oro en su último informe, aunque las compras netas de oro por parte de los bancos centrales aumentaron un 28%, un apetito más bajo por las joyas de oro y las lingotes físicos del metal dorado ha arrastrado a la demanda global un 16% en el segundo trimestre tras registrar niveles récord durante el mismo período un año antes, aunque la tendencia seguirá siendo alcista en los próximos cinco años.
El mes pasado, Citigroup aseguró que el interés de los inversores vuelve poco a poco a las materias primas, mientras Société Générale considera a este mercado como una "bolsa muy mixta" en todos los sectores, manteniendo una mayor exposición en los productos agrícolas y en un menor grado en la energía, pero infrapondera de forma masiva el grupo de los metales preciosos.