Canopy Growth se está planeando comprar Wana Brands, la marca de comestibles de cannabis número uno de Norteamérica. Ésa fue la gran noticia en el sector del cannabis la semana pasada, ya que el anuncio se hizo el jueves pasado.
Pero aún está por ver la magnitud de este acuerdo.
Las acciones de Canopy Growth reaccionaron inmediatamente a la noticia, subiendo en torno a 1 dólar, o cerca de un 8%, en las operaciones intradía del pasado viernes, alcanzando los 14,36 dólares en el NASDAQ. Pero el productor de cannabis cerró la semana a 13,35 dólares, casi exactamente donde se encontraba el día antes del anuncio.
Esto no significa que el acuerdo no conlleve un enorme potencial de crecimiento futuro para la empresa de marihuana con sede en Canadá. Wana Brands es una empresa líder en el mercado estadounidense de comestibles, que es uno de los sectores de más rápido crecimiento en el entorno del cannabis. Por cuota de mercado, Wana es la principal marca de Estados Unidos. Y según los estudios de Canopy, los comestibles son —y seguirán siendo— el producto más popular para los nuevos clientes en el mercado del cannabis.
El acuerdo anunciado da a Canopy el derecho a comprar Wana cuando se legalice la marihuana a nivel federal.
La adquisición pospuesta está estructurada en tres contratos de opciones separados. En primer lugar, Canopy realizará un pago inicial de 366 millones de dólares canadienses en efectivo. Los contratos de opciones sitúan a Canopy con una opción de compra de todas las participaciones en tres de las filiales de Wana: Mountain High Products, Wana Wellness y The Cima Group.
Cuando se haga efectivo el acuerdo, Canopy será propietaria y operadora de las instalaciones de Wana en Colorado y tendrá sus licencias de explotación en 11 estados. Pero la empresa se está expandiendo rápidamente. Para finales de 2022, se espera que Wana opere en más de 20 estados.
El director general de Canopy, David Klein, dijo en un comunicado:
"En nuestro camino hacia el establecimiento de a Canopy Growth como la compañía de cannabis líder en el mundo, la adquisición de la marca de comestibles de cannabis número uno de Norteamérica servirá para fortalecer nuestra posición en el mercado tanto en Canadá como en Estados Unidos. El derecho a adquirir Wana asegura otra vía importante y directa en el mercado de THC de Estados Unidos una vez que se autorice a nivel federal y en Canadá añadiremos las gominolas con cannabinoides a nuestras marcas líderes en el sector. Confiamos en el futuro crecimiento de la categoría de comestibles y en las enormes oportunidades que ofrece Wana".
Pero la verdadera magnitud de este movimiento para Canopy debe mirarse a través de la lente de su otro acuerdo estratégico para no sólo entrar en el mercado estadounidense tras la legalización de la marihuana en sus estados, sino para convertirse inmediatamente en un actor dominante del mayor mercado de marihuana del mundo. Esa otra operación es su acuerdo de adquisición de otro nombre importante en el mercado estadounidense: Creage Holdings, un operador multiestatal.
Estos dos acuerdos permitirán a Canopy establecerse rápidamente en el mercado estadounidense, no sólo en el mercado de la hierba recreativa, sino también en los dos principales carriles de expansión: los comestibles y las bebidas infusionadas.
Reflexión sobre la legalización en Canadá
El domingo se cumplió el tercer aniversario de la legalización de la marihuana en Canadá. La ocasión está dando a los reguladores el incentivo para reflexionar sobre lo que ha ido bien y lo que ha ido mal.
Para ello, el Gobierno canadiense ha anunciado una revisión de 18 meses de la legislación que legalizaba la sustancia, que muchos en el sector esperan que produzca cambios para reducir los obstáculos regulatorios que incluyen restricciones de envasado y límites de potencia.
Sin embargo, hay dos puntos a tener en cuenta: desde la legalización, se ha eliminado aproximadamente la mitad del mercado ilegal de la marihuana en Canadá. Y, según las estadísticas del Gobierno, se han generado 1.068.900 millones de dólares canadienses en impuestos federales y regionales por la venta legal de cannabis desde octubre de 2018, cuando se promulgó la legalización. Eso supone dos grandes ventajas sociales.