La sesión en las bolsas europeas fue AYER de más a menos, con los mercados financieros italianos “marcando el paso” a los demás. Así, el comienzo de la sesión fue muy positivo en Europa, con los inversores “celebrando” el gran comportamiento que mostraban los bonos y la bolsa italiana desde comienzos de la sesión. En nuestra opinión, dos fueron los factores que provocaron este positivo inicio de sesión en Italia: i) el hecho de que la agencia de calificación crediticia Moody’s evitara bajar hasta “grado de no inversión” el rating de la deuda italiana y, sobre todo, que situara la perspectiva en “estable”, con lo que anuncia que, de momento, no volverá a bajar la calificación crediticia al país; y ii) el elevado nivel de sobreventa tanto de los bonos como de la bolsa italiana, algo que fue aprovechado al comienzo de la jornada por los inversores más “osados”. El buen comportamiento de los mercados italianos, así como la fuerte subida de las bolsas chinas de madrugada animó a los inversores a tomar posiciones en renta variable. No obstante, “la alegría” duro poco, al quedar patente que tanto los bonos italianos como la bolsa del país iban perdiendo fuerza a medida que avanzaba la sesión. La debilidad mostrada por Wall Street poco después del inicio de su sesión puso “la puntilla” a los mercados europeos de renta variable, cuyos índices cerraron con pérdidas, muy lejos de sus niveles más altos del día.
Para aquellos que se muestran escépticos sobre la influencia de la política en los mercados, que los hay, sólo señalar que desde la celebración de las elecciones italianas el FTSE Mib ha cedido el 16% y desde la formación del gobierno populista casi el 15%. A su vez, la cotización de uno de los principales bancos italianos, UniCredit (MI:CRDI), ha perdido respectivamente el 34% y el 24%. Por su parte, la rentabilidad del bono 10 años italiano ha pasado del 1,97% antes de las elecciones y el 2,74% el día en que se constituyó el nuevo ejecutivo a cerrar AYER en el 3,47%. La prima de riesgo, por su parte, era de 133 puntos básicos antes de las elecciones; de 237 puntos básicos cuando se formó el Gobierno, situándose ahora algo por encima de los 300 puntos básicos, y eso que AYER bajó casi 11 puntos básicos.
Por su parte, y en la bolsa española el sector bancario volvió a ser protagonista. Tras un comienzo de sesión muy alcista, las cotizaciones de las principales entidades cotizadas giraron a la baja para terminar el día con fuertes pérdidas, convirtiéndose en un verdadero lastre para los índices. La inseguridad jurídica generada por el Tribunal Supremo en lo que hace referencia a la sentencia sobre el pago de los impuestos de las hipotecas está pesando, y mucho, en el comportamiento de un sector que venía ya de por sí “tocado” este año por la baja rentabilidad que es capaz de alcanzar en un escenario de tipos “ultrabajos” y con una regulación que le exige mantener unas elevadas ratios de capital. Según se anunció AYER, será el 5 de noviembre cuando el Pleno del Alto Tribunal, pleno en el que se decidirá quién es el que debe hacer frente al pago del impuesto de las hipotecas, el banco o el cliente y, de mantenerse la reciente sentencia que establece que el impuesto de actos jurídicos documentados debe pagarlo la banca, si ésta tiene efectos retroactivos. Todo un lío que seguirá lastrando el comportamiento del sector en bolsa, al menos a corto plazo.
Por último, y en lo que hace referencia a Wall Street, señalar que la sesión no fue positiva en este mercado, con el sector bancario y el energético lastrando el comportamiento de los dos principales índices, el Dow Jones y el S&P 500, que cerraron el día con pérdidas. El buen comportamiento del sector tecnológico durante la sesión permitió al Nasdaq Composite terminar el día con ligeros avances. En este mercado pesaron los ya consabidos conflictos geopolíticos, en especial la disputa comercial con China, que no tiene visos de finalizar pronto, y el conflicto internacional que ha generado el asesinato de un periodista saudita a manos de operativos del régimen saudí, algo que el país árabe no ha terminado de explicar convincentemente. Un enfrentamiento entre Occidente y Arabia Saudita por este tema asusta a muchos inversores, que recuerdan la crisis del petróleo de 1973 y sus efectos en la economía mundial. En este sentido, señalar que no creemos que la cosa vaya a ir tan lejos. De momento Arabia Saudita ha reiterado que no tiene intención de utilizar el petróleo como arma en caso de que reciba sanciones por parte de la comunidad internacional.
Estos temas han seguido pesando de madrugada en las bolsas asiáticas, que han cerrado con fuertes pérdidas, incluidas las chinas en las que se han impuesto las tomas de beneficios tras dos días de fuertes alzas. Así, esperamos que las bolsas europeas abran a la baja. Además de por los mencionados conflictos geopolíticos, estos mercados seguirán muy condicionados por el conflicto entre el Gobierno populista italiano y la UE a costa del proyecto de presupuestos 2019 que ha presentado y que ha sido rechazado por el Comisión Europea (CE). HOY se sabrá la postura definitiva que adopta la UE al respecto, tras reiterar AYER el Ejecutivo italiano que no tiene intención de modificar su presupuesto. Habrá que seguir de cerca el comportamiento de los bonos italianos durante la sesión, comportamiento que sirve de “termómetro” para determinar en cada momento el sentimiento que genera entre los inversores la evolución del mencionado conflicto.
Por lo demás, señalar que la agenda macro del día es bastante liviana, destacando únicamente la publicación por parte de la Comisión Europea (CE) de la lectura preliminar de octubre del índice de sentimiento de los consumidores de la Zona Euro. No ocurre lo mismo con la agenda empresarial, con multitud de cotizadas francesas dando HOY a conocer un anticipo de sus resultados trimestrales -ver Eventos Empresas del Día- y con compañías como 3M (NYSE:MMM), Caterpillar (NYSE:CAT), McDonald’s (NYSE:MCD), Texas Instruments (NASDAQ:TXN) o Verizon (NYSE:VZ) publicando sus cifras trimestrales en Wall Street. De momento la temporada de resultados está siendo positiva en este mercado, a pesar de que se observa una cierta ralentización del ritmo de crecimiento de las ventas, aunque la recepción de los inversores de los resultados que están publicando las cotizadas estadounidense está siendo bastante “fría”.