Con los precios del petróleo en máximos de cuatro años y los precios del gas natural disparados en Europa y Asia, la pregunta clave es ¿por qué la industria estadounidense del fracking no ha respondido a la subida de los precios con un incremento considerable de la producción?
Después de todo, la fracturación hidráulica o fracking de Estados Unidos ha sido descrita como "ágil", así que ¿adónde ha ido a parar esa flexibilidad?
La razón más común citada por las principales compañías petroleras estadounidenses es que pretenden mantener la producción sin cambios para aumentar los dividendos para los accionistas. Una respuesta bastante conveniente, que les permite centrar sus esfuerzos en factores que los hacen más atractivos para los inversores, pero esta respuesta no cuenta toda la historia.
En una columna anterior, a principios de este año, sobre la encuesta energética del primer trimestre realizada por el Banco de la Reserva Federal de Dallas en marzo, detallé cuatro factores principales —la consolidación de la industria, las dificultades de financiación, las previsiones pesimistas y la regulación federal— que impiden a las compañías petroleras producir más petróleo.
La última encuesta de la Fed de Dallas revela algunos problemas nuevos y algunas sorpresas, como el aumento de los costes y la incapacidad de contratar personal cualificado. He aquí tres de las conclusiones más importantes para los traders de petróleo según la última encuesta:
1. La producción no se ve afectada por los precios ni por las previsiones de precios
El mayor cambio entre las encuestas del primer y el segundo trimestre se produjo en la revisión de las previsiones de precios. En marzo, muchas empresas de exploración y producción tenían opiniones pesimistas sobre los precios del petróleo. En ese momento, el WTI cotizaba a unos 61 dólares por barril. La mayoría de los encuestados en marzo creía que el precio del WTI bajaría a finales de diciembre de 2021.
Ahora, el WTI ronda los 75 dólares por barril.
La última encuesta revela que el 64% de los encuestados cree que el precio del WTI se situará entre 65 y 75 dólares por barril a finales de diciembre de 2021, y el 19% espera que el precio del crudo pueda alcanzar los 80 dólares por barril a finales de diciembre de 2021. Sin embargo, la producción de petróleo ha aumentado sólo ligeramente desde marzo, a pesar de la subida del 25% del precio y del aumento del optimismo observado en las previsiones.
Según la Administración de Información Energética, la producción de petróleo de Estados Unidos era de 11,1 millones de barriles al día a finales de marzo de 2021, pero sólo aumentó en 400.000 barriles al día a finales de agosto. Nota: los datos de finales de agosto se recogieron antes de que el huracán Ida interrumpiera temporalmente la mayor parte de la producción en alta mar del Golfo de México.
Durante mucho tiempo se creyó que, debido a la naturaleza del proceso de fracking y a los gastos de capital por pozo relativamente bajos, las empresas de fracking podían desplegar o reducir rápidamente la producción en función de los precios del petróleo. Puede que esto siga siendo cierto en un sentido técnico, pero los datos muestran que no es así como están actuando los productores de petróleo de esquisto.
2. El aumento de los costes es un nuevo impedimento
Muchas empresas productoras de Estados Unidos que respondieron a la encuesta citaron el aumento de los costes de las materias primas, el combustible y el personal como factores que inhiben el crecimiento de la producción. Por ejemplo, el 39% de las empresas afirmó que su empresa estaba teniendo problemas de contratación y que los trabajadores exigían más sueldo del que ellas ofrecían. Las restricciones gubernamentales y los problemas para obtener licencias de construcción de oleoductos y gasoductos también se consideraban un factor que ha aumentado los costes de las empresas. Además, algunos han citado continuos problemas con la cadena de suministro.
Para los traders, la conclusión importante es que el precio que los productores dicen necesitar para perforar un nuevo pozo de manera rentable no es una medida valiosa para entender si los productores de petróleo de esquisto aumentarán la producción. En marzo, los productores informaron de que podrían perforar pozos de manera rentable en todas las regiones de petróleo de esquisto de Estados Unidos si el precio del WTI superaba los 58 dólares por barril.
Los precios del WTI no sólo se han mantenido por encima de los 60 dólares por barril desde entonces, sino que han subido de forma constante hasta situarse en torno a 75 dólares por barril. Sin embargo, los productores apenas han perforado nuevos pozos y ahora aducen como motivo el aumento de los costes. Está claro que esta métrica no es útil para entender el crecimiento de la producción en este momento.
3. Los problemas de financiación podrían cambiar
La falta de acceso a las fuentes tradicionales de capital sigue siendo un problema para los productores de petróleo, aunque algunos han informado de que creen que los financiadores se verán obligados a volver al parche de esquisto porque las empresas se están adhiriendo a la disciplina de capital, están pagando la deuda y las previsiones de precios están al alza. Aunque algunos encuestados siguen creyendo que las actitudes negativas hacia la producción de combustibles fósiles propugnadas por la actual Administración seguirán lastrando la financiación, esta opinión no es mayoritaria.
En general, existe un nuevo optimismo entre las empresas en cuanto a que pronto podrán atraer nuevas inversiones. Puede que eso sea demasiado optimista, pero los traders querrán estar pendientes de los acuerdos de financiación en las zonas de esquisto como forma de calibrar cuándo podría estar lista la producción de crudo de Estados Unidos para un crecimiento real.