Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
En las últimas 24 horas, el presidente Trump y los funcionarios de la Casa Blanca se han estado movilizando, tratando enérgicamente de animar a los mercados. Las acciones se consolidaron cerca de sus máximos la semana pasada y no requirieron el impulso adicional, pero el presidente pudo haber querido un impulso de moral en forma de subida de las acciones tras la escasa participación en su mitin de Tulsa. Independientemente de eso, los inversores respondieron positivamente a la reafirmación de Trump de que el acuerdo comercial entre Estados Unidos y China sigue intacto y a los comentarios de un nuevo paquete de estímulos de 1 billón de dólares más. Hay pocos datos de Estados Unidos pendientes de publicación en la agenda esta semana, así que dijimos que los titulares (particularmente los relacionados con los estímulos) serían el principal motor de los flujos del mercado. La confusión causada por la retractación del asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, tras sus declaraciones de que el acuerdo comercial entre Estados Unidos y China estaba acabado también pone de relieve la volubilidad de la Administración y su sensibilidad a la opinión pública.
Mientras que las acciones se desplomaban, el dólar estadounidense perdía posiciones con respecto a las demás monedas principales, registrando el par USD/JPY mínimos de seis semanas. La actividad de los sectores manufacturero y de los servicios mejoró en el mes de junio según los PMI de Markit, aunque menos de lo esperado. Las ventas de vivienda nueva repuntaron, pero este informe no ha conseguido impulsar al billete verde. La venta de dólar junto con la subida del oro, que ha registrado nuevos máximos de siete años, es una señal de que los inversores no están convencidos de que las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China estén avanzando y que el Congreso aprobaría un gran paquete de estímulos.
Los PMI de la eurozona, mejores de lo esperado, impulsaron el par EUR/USD por encima de 1,13. La actividad del sector manufacturero y de los servicios mejoró en Alemania y en la región en su conjunto en junio, lo que es coherente con la recuperación general que hemos estado observando en la economía. El índice PMI compuesto de la Eurozona subió de 31,9 a 47,5. El Gobierno alemán también dijo que no esperan un colapso económico con la segunda oleada. Las ganancias de la libra fueron más discretas a pesar de que el Reino Unido también reportó mejoras en sus sectores manufacturero y de los servicios. De hecho, el índice PMI manufacturero subió de 50 a 50,1 puntos, lo que indica una expansión muy discreta. El británico, Boris Johnson, también relajó las medidas de distanciamiento social, permitiendo que dos hogares se reúnan en cualquier entorno y reduciendo la restricción de distancia de dos metros a un metro. El turismo también se reactivará junto con los pubs, cines, galerías y bibliotecas. Ayer señalamos que el Reino Unido informó de un descenso de los casos desde marzo, lo que ha dado al Gobierno la confianza para anunciar estas últimas medidas.
Los dólares canadiense, australiano y neozelandés ampliaron ganancias. El segundo se ha beneficiado de los positivos titulares comerciales sobre la relación entre Estados Unidos y China y los PMI más robustos del Commonwealth Bank. La subida del dólar canadiense fue más discreta después de que Estados Unidos amenazara con volver a imponer aranceles del 10% sobre las importaciones de aluminio procedentes de Canadá al final de la semana si Ottawa no restringe voluntariamente las exportaciones.
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