Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
El debilitamiento de los datos podría no retener a los alcistas. Las acciones de Estados Unidos repuntaron por segunda jornada consecutiva a pesar de unos descensos mayores de lo previsto de los datos de vivienda, licencias de obra y confianza de los consumidores. La ralentización del mercado inmobiliario no es ninguna sorpresa pero el deterioro del informe sobre la confianza de los consumidores del Conference Board va en contra de la mejora indicada en el informe de la Universidad de Michigan de este mes y el repunte de las acciones de febrero. El par USD/JPY también amplió su recuperación pero seguimos creyendo que el par va a descender especialmente tras la última tanda de datos de Estados Unidos. Aparte de una mejora en el interés por el riesgo, el billete verde también recibió un impulso gracias al rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense. Aunque el plan de no subir los tipos este año es positivo para las acciones, el motor principal es la incertidumbre a escala mundial, que es negativa para la moneda. Aunque el repunte podría desvanecerse, si sigue ampliándose, los vendedores entrarán en el nivel de 111. Los datos sobre la balanza comercial se publican el miércoles y, aunque la actividad manufacturera sigue siendo lenta, el déficit registró máximos históricos el mes pasado así que es probable una recuperación. Si los informes económicos de este martes no perjudican al dólar, el informe sobre el comercio del miércoles seguramente tampoco lo haga.
La moneda que peor rendimiento ha ofrecido ha sido el euro, que descendió por debajo del nivel de 1,1300 y va camino de 1,1250. Todas las demás divisas principales han subido así que el EUR/USD está revirtiendo la tendencia. Lo interesante de este movimiento es que no se han publicado más informes económicos de la eurozona y el rendimiento de los bonos de Alemania ha seguido la estela de los de Estados Unidos al alza. Durante la jornada en Europa, se habló un poco del llamado TLTRO-3, incluyendo la posibilidad de ofrecer más detalles en junio pero en ese momento el EUR/USD iba camino del nivel de 1,1325 y no empezó a descender hasta la apertura de la jornada de negociación de Estados Unidos. Sin embargo, los problemas económicos de la eurozona son bien conocidos y con el rendimiento de los bonos a 10 años de Alemania en negativo, el par fue el que más se vio perjudicado por la recuperación del billete verde.
La libra se aferra a sus recientes ganancias tras conocerse que los miembros del Parlamento están empezando a ver el acuerdo de May como una mejor alternativa que un Brexit sin acuerdo o la cancelación del Brexit. Sin embargo, el Partido Unionista Democrático ha comparado el plan de May a una pena de prisión y afirman que preferirían un aplazamiento de un año que apoyar su acuerdo de salida. El Parlamento se hizo con el control del proceso de Brexit, arrebatándole la agenda del Parlamento al Gobierno por primera vez en más de 100 años. Su primera medida será celebrar una serie de votaciones indicativas el miércoles de las alternativas al acuerdo de May. La libra por consiguiente seguirá siendo centro de todas las miradas y estará sujeta a una gran volatilidad intradía.
Por ahora, los inversores no perderán de vista el dólar neozelandés. Un informe de comercio mejor de lo esperado, que ha indicado que Nueva Zelanda registró un superávit comercial en el mes de febrero, tuvo muy poco impacto en la moneda. El Banco de la Reserva celebra su reunión y los traders están deseando comprobar si las recientes mejoras de la economía bastarán para que la postura del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda siga siendo firmemente neutral. Cuando el banco central se reunió el mes pasado, rebajaron sus previsiones de subida de los tipos hasta principios de 2021 pero el dólar neozelandés se disparó después de que el gobernador del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda, Adrian Orr dijera que las probabilidades de flexibilización no han aumentado y señalara que el crecimiento debería recuperarse. Desde entonces, el sector manufacturero, el sector empresarial y la confianza de los consumidores han descendido pero el gasto con tarjeta de crédito, la actividad comercial, el crecimiento, los precios y la venta de vivienda están subiendo. Las acciones también han registrado máximos, lo que beneficiará a la confianza de los consumidores y la confianza empresarial.