Asistimos ayer a una positiva sesión en los mercados de valores europeos, lo que permitió a sus principales índices cerrar la jornada con avances generalizados. Tal y como esperábamos, los valores relacionados con las materias primas minerales y, sobre todo, con el petróleo, mantuvieron un buen tono durante la sesión, animados por el repunte de los precios de estos productos.
Hay que destacar que el precio del crudo volvió a marcar máximos multianuales, con la variedad estadounidense WTI siendo capaz de superar los 70 dólares por barril por primera vez desde finales de 2014. Detrás de este reciente rally experimentado por el precio del crudo hay varios factores, destacando la posibilidad de que la Administración Trump opte por abandonar el acuerdo firmado entre varias potencias occidentales con Irán, por el que este país abandonaba su proyecto nuclear o, al menos, lo retrasaba en el tiempo, a cambio de que Occidente le levantara las sanciones que pesaban sobre sus exportaciones.
Además, los problemas de producción que está atravesando Venezuela, que se pueden ver intensificados en los próximos meses, han servido para reducir la oferta de producto y facilitar el cumplimiento del acuerdo de reducción de producción por parte de sus socios de la OPEP.
Este tema, el del acuerdo firmado entre Occidente e Irán, será hoy protagonista ya que el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció ayer que a las 14:00 horas, hora de la Costa Este estadounidense (20:00 horas; CET) anunciará su decisión definitiva al respecto. En ese sentido, señalar que tras el anuncio el precio del crudo perdió algo del terreno que había ganado durante la jornada, mientras que los principales índices de la bolsa estadounidense cedían desde sus niveles máximos del día, lo que no les impidió terminar la jornada con significativos avances. Esta reacción pudo ser producto de las dudas de los inversores sobre la posición que adoptará definitivamente el Gobierno de EE.UU. con relación a Irán.
Existen varias posibilidades, que van desde la ruptura total del pacto y la imposición de nuevas sanciones unilaterales a las exportaciones de Irán, lo que podría retirar del mercado entre 200.000 y 300.000 barriles de crudo al día, a escenarios más moderados en los que EE.UU. llega a un acuerdo con los países europeos que firmaron el acuerdo con Irán, con el objetivo de enmendar el mismo y permanecer en el pacto.
Por su parte, Irán se ha resistido a modificar el tratado o circunscribir sus actividades en el Medio Oriente, aunque el presidente iraní, Rouhani, manifestó ayer que su país podría permanecer en el pacto nuclear incluso si EE.UU. lo abandonara. De momento, el precio del crudo ha seguido cediendo terreno esta madrugada en los mercados asiáticos, lo que entendemos será un lastre para las compañías directa e indirectamente relacionadas con el mismo cuando abran esta mañana las bolsas europeas.
Otro sector que ayer mantuvo un gran comportamiento tanto en Europa como en EE.UU. fue el tecnológico, con Apple (NASDAQ:AAPL) y sus “proveedores” manteniendo el buen tono de los últimos días. Parece que los inversores comienzan a “premiar” a las compañías que han presentado buenas cifras trimestrales, especialmente a las que han transmitido buenas sensaciones sobre la evolución futura de sus negocios.
Señalar, por otro lado, que el dólar siguió mostrando gran solidez durante la jornada, especialmente respecto al euro, mientras que en el mercado de bonos europeo prosiguieron las caídas de las rentabilidades, al optar nuevamente los inversores por tomar posiciones en este tipo de activos dada la debilidad tanto del crecimiento económico como de la inflación en la región, hecho que puede llevar al Banco Central Europeo (BCE) a mantener sus políticas monetarias ultralaxas por más tiempo del en principio descontado por los mercados. Este escenario no es positivo para un sector bancario que hasta hace poco se “las prometía muy felices” con el repunte que habían experimentado los tipos a largo plazo en la región, hecho que elevaba sus expectativas de incrementar sus márgenes y sus paupérrimas rentabilidades actuales sobre recursos propios.
Hoy, y, para empezar, esperamos que las bolsas europeas abran con ligeros retrocesos, en una sesión en la que es posible se vuelva a notar entre los inversores cierta aprensión al riesgo, a la espera de conocer la decisión que adopta EE.UU. con relación a Irán. De ser ésta “moderada”, y dar tiempo a renegociar con sus aliados algunas modificaciones al tratado actual, el impacto en las bolsas será marginal. No así en el precio del crudo, que podría sufrir algunas tomas de beneficios, al haber descontado los inversores un escenario de ruptura más radical.
Por lo demás, señalar que la agenda macro incluye hoy la producción industrial alemana de marzo. Ayer los pedidos de fábrica de Alemania del mismo mes sorprendieron muy negativamente, lastrados por la débil demanda exterior, especialmente de la zona euro. Además, por la tarde se conocerán en EE.UU. los empleos disponibles del mes de marzo, cifra que esperamos vuelva a mostrar la fortaleza por la que atraviesa el mercado laboral estadounidense.
En el ámbito empresarial, señalar que hoy publicarán sus cifras trimestrales importantes empresas europeas, entre las que destacaríamos al banco italiano Intesa Sanpaolo (MI:ISP), a las alemanas Continental (DE:CONG) y Deutsche Post (DE:DPWGn), a la holandesa Royal DSM (OTC:RDSMY) y a la suiza Swiss Life (SIX:SLHN). En España destaca la publicación de las cifras de dos empresas del Ibex 35: la eléctrica Endesa (MC:ELE) y Meliá Hotels International (MC:MEL), así como de las de Tubacex (MC:TUBA).