Apertura al alza en Wall Street tras las bajadas de ayer y con los ojos puestos en el dato de empleo del viernes y, sobre todo, que China cierra hasta el lunes por festividades, por lo que nos quita un factor del mercado y nos deja a solas con la Reserva Federal (Fed) y los datos macro.
Entramos en la mitad de la semana con algunos factores positivos, pero también con negativos. Parece que no es mucho pero sí lo es, ya que en los últimos días sólo teníamos negativos.
La pelea sigue siendo la misma con los mismos frentes: la situación de China con extensión a las materias primas y el crudo por un lado, y por el otro los efectos secundarios de una subida de tipos bien este mes o en diciembre.
Por lo que toca a China, hay factores de frenado en el miedo del mercado porque el Gobierno sigue entrando como un elefante en una cacharrería y buscando culpables entre los malvados especuladores de los movimientos del mercado, así que el brazo se acorta a los operadores, lo que suaviza los movimientos. También China entra en festividades u no abrirá hasta el lunes, lo que supone un alivio para todos, como cuando un bebé llorón le da por dormirse: paz hasta que despierte… Así que toca disfrutar del momento.
Si China se duerme, lo que nos queda es la subida de tipos en EE.UU. Ahora seguimos mirando con mucho cuidado al mercado para saber qué interpretación hace de los datos macro, pues ya explicamos que con China se quieren mejor de lo esperado para ver si hay fortaleza, pero si China se calma, como dijo Fischer, entonces volveremos a necesitar datos peores de lo esperado para que la subida no sea este mes.
El viernes tenemos el dato de empleo de EE.UU de agosto y hoy hemos conocido el ADP que queda en +190.000, peor de lo esperado que eran 201.000, y nos deja con dudas porque no es ni muy malo ni muy bueno, por lo que asoma cierta interpretación positiva porque no quita ni pone ni a China ni a la Fed.
También hemos conocido la productividad, que es más alta de lo esperado, pero por un fuerte desplome de los costes laborales, algo que no pone presión alcista a la subida de tipos y tampoco habla de las mejoras salariales que tanto se necesitan para que el consumo interno mejore… así que positivo por no ver presión para la Fed.
Los datos no acaban, porque tenemos el ISM de negocios de Nueva York a las 15.45 horas, hora española, y 15 minutos más tarde los pedidos a fábrica.
Pasando a aspectos técnicos, tenemos que los fuertes descensos de ayer no llevaron a los índices a atacar los mínimos de agosto y mientras estemos por encima, es una buena señal, como se puede ver en el gráfico del NYSE, así que debemos estar pendientes de si unos precios más bajos pueden atraer más dinero:
El rebote debe ser vigilado desde múltiples puntos de vista y si miramos el comportamiento de los sectores del S&P 500 en el mismo, nos damos cuenta que se ha polarizado en dos: el que tira del resto es el de energía por el disparo al alza del precio del crudo y las utilities que tiran a la baja por la convicción de que tendremos subida de tipos este año y como activo son menos atractivas, por lo menos en el rebote:
Con respecto al crudo, ojo que hoy está dañado porque ayer las reservas calculadas por el API marcaron subida sorpresa de las reservas de crudo, que deben ser confirmadas por las de hoy.
En valores concretos tenemos:
Intel (NASDAQ:INTC) puede tener buen comportamiento tras decir ayer tarde que va a poner a punto los micros nuevos para ordenadores y así ayudar a la recuperación de las ventas de los ordenadores.