Hasta el momento, esta semana ha vuelto a ser un nuevo intento fallido de romper la resistencia de varios meses en el DJ Euro Stoxx 50 y el DAX alemán.
Es complicado señalar un único factor como el causante de la limitación del impulso alcista, aunque siempre resulta fácil culpar al permanente estado de tensión entre Ucrania y Rusia.
Por otra parte, el Euro Stoxx 50 sí ha marcado un rally cercano al 4,50% desde los mínimos intradiarios del 15 de abril hasta los máximos de principios de esta semana, por lo que tiene mucho sentido que se haya tomado un respiro momentáneo.
Entre tanto, el movimiento del precio más constructivo que podríamos ver en el índice sería cierta consolidación lateral en un rango estrecho, y preferiblemente por encima de sus medias móviles de 50 y 100 sesiones.
Esto incrementaría las posibilidades de ser capaces por fin de superar este molesto nivel de resistencia de varios meses y liberar al índice para que tienda al nivel de 3.200.
En este sentido, teniendo en cuenta que el Euro Stoxx 50 tiene otra vez muchas ganas de romper la resistencia así como lo que mencionaba el martes pasado, esto es en lo que estoy más centrado ahora mismo, y me olvido de las acciones individuales.
Mi argumento es que, en la coyuntura actual, es decir, en los últimos coletazos de un mercado alcista cíclico, necesitamos ver un mayor liderazgo por parte de las grandes acciones mega-capitalizadas, para dar un impulso alcista a los parqués.
Si el EuroStoxx 50 es capaz finalmente de romper la resistencia, volvería a centrarme más en acciones individuales para buscar oportunidades.
El DAX se encuentra en una situación muy parecida a la del Euro Stoxx50, por lo que hoy no me voy a molestar en publicar el gráfico.
Entre tanto, en Bélgica, el índice BEL 20 ha subido con facilidad más de un seis por ciento en lo que va de año. ¿Seguro que no se habían dado cuenta, verdad?
Aunque es un dato despreciable si lo comparamos con la subida cercana al 12% del índice italiano FTSE MIB que ha experimentado en lo que llevamos de 2014, tampoco conviene perderlo de vista, sobre todo si dicho índice nos puede proporcionar posiciones de fortaleza relativa en determinadas acciones individuales del mismo.
Un valor que integra el índice BEL 20 es el gigante de la cerveza Anheuser-Busch InBev que a principios de esta semana se ha lanzado a su máximo histórico registrado hace solo 12 meses.
La acción sigue empujando al alza con el soporte de unos mínimos más altos a principios de año, lo que incrementa las posibilidades de que la acción pudiera romper finalmente el área de los 79,50 euros y lanzarse hacia el entorno de los 85 euros más pronto que tarde.