Atenas, 27 abr (EFE).- El primer ministro griego, el socialista
Yorgos Papandréu, aseguró hoy en Atenas que pondrá orden en la
descalabrada economía de su país y lo liberará así del control de
entidades externas.
En un discurso ante su grupo parlamentario, que cuenta con 160
del total de 300 escaños de la Cámara griega, Papandréu afirmó que
el objetivo de su Gobierno es "liberar a Grecia de la supervisión de
los que asumen decisiones con nosotros".
El jefe del Ejecutivo heleno aludió así al Fondo Monetario
Internacional, el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea
(CE) que han sometido a Grecia a un estricto control con el fin de
verificar que se cumplen las condiciones exigidas para que Atenas
pueda acceder a sus préstamos.
"(Ellos) no se irán ni con piedras, ni con ningún tipo de
violencia, sino cuando nosotros pongamos orden en nuestro país y
hayamos terminado con la corrupción y con la evasión de impuestos",
sentenció Papandréu.
El primer ministro destacó que su país atraviesa el momento más
difícil de los últimos años, con una situación sin precedentes
también en el contexto mundial.
"Atravesamos juntos los momentos más difíciles de los últimos
años, en circunstancias nunca vistas no sólo para Grecia, sino para
Europa y la economía mundial", señaló.
Papandréu reconoció hoy que "las medidas (de austeridad), aunque
dolorosas, son necesarias" y se mostró "decidido personalmente a
avanzar con los cambios, ya que es ahora o nunca".
Los trabajadores griegos continuaban hoy con sus protestas contra
el paquete de ahorro adoptado por el Gobierno, que incluye dolorosos
recortes salariales y aumentos de cargas impositivas, que han
paralizado el transporte público en la capital desde el mediodía y
con mítines en las calles.
También rechazan medidas adicionales que puedan imponerse como
condición del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los 16 países de
la Eurozona para conceder su ayuda de 45.000 millones de euros en
préstamos. EFE