Investing.com – Los precios del cobre descendieron este martes después de que un par de informes sobre el sector manufacturero chino contribuyeran a las preocupaciones suscitadas en torno a la profunda ralentización de la segunda economía del mundo.
En lo relativo a la división Comex del New York Mercantile Exchange, el cobre para entrega en septiembre se negoció a 2,314 USD por libra durante la mañana de la jornada de negociación en Londres, con un retroceso del 1,01% o 2,4 centavos. Los precios del metal rojo se habían dejado un 0,36% o 0,8 centavos durante la jornada anterior.
El la lectura definitiva del índice de gestores de compras de Caixin/Markit sobre el sector manufacturero correspondiente a agosto se situó en 47,3 puntos, su cota más baja desde marzo de 2009.
Mientras, la lectura del índice oficial de gestores de compras sobre el sector manufacturero chino descendió hasta 49,7 puntos, frente a los 50 de julio, su cota más baja desde agosto 2012.
Una lectura por debajo de 50,0 puntos indica una contracción en el sector de la industria.
Los inversores en cobre consideran la actividad industrial de China un indicador de la demanda de cobre de la nación, pues el metal rojo es muy utilizado en dicho sector.
Las acciones de Asia cayeron este martes; el índice compuesto de Shanghái ha descendido un 1,2% al debilitarse el interés por los activos considerados de riesgo ante los indicios de que la economía de China está perdiendo fuelle.
Los precios del cobre se desplomaron hasta situarse el pasado 24 de agosto en 2.202 USD, mínimos de seis años, pues las preocupaciones suscitadas en torno al estado de la economía china y las pronunciadas pérdidas en los mercados de valores de China lastraban el interés por el metal rojo.
La agitación en los mercados comenzó cuando China devaluó inesperadamente el yuan el pasado 11 de agosto, avivando los temores de que la economía se esté ralentizando a mayor ritmo del que estaba previsto.
El Gigante Asiático es el mayor consumidor de cobre del mundo y concentra casi el 40% del consumo mundial.
En otros ámbitos del Comex, el oro para entrega en diciembre se disparó un 0,86% o 9,70 USD hasta los 1.142,20 USD por onza troy, pus las pronunciadas pérdidas de los mercados de valores respaldaban la demanda del metal precioso.
En Europa, el DAX de Alemania se dejó casi un 2%, mientras que el Dow y el S&P 500 auguraron pérdidas de al menos un 1,5% a la apertura, pues los temores en torno a la ralentización económica global liderada por China soliviantó a los operadores y azotó la confianza de los mismos.
Los inversores aguardaban la publicación del informe sobre empleo de agosto de Estados Unidos, previsto para el viernes, pues podría arrojar algo de claridad sobre las probabilidades de una subida de los tipos de interés a corto plazo.
Las previsiones apuntan a que se habrá producido un crecimiento laboral de 220.000 empleos el mes pasado tras el aumento de 215.000 de julio, mientras que la tasa de desempleo descenderá seguramente del 5,3% al 5,2%.
Los economistas perciben este aumento mensual de más de 200.000 empleos como una muy buena señal en cuanto a crecimiento laboral.
A lo largo de la jornada, el Instituto de Gestión de Suministros de EE.UU. hará públicos sus datos sobre el crecimiento del sector manufacturero.
El oro perdió un 2% durante la semana pasada ante las expectativas de que la Reserva Federal comenzará a subir los tipos de interés en su próxima reunión sobre política monetaria de septiembre.
La fecha en que la Fed subirá los tipos de interés ha sido fuente constante de debate en los mercados durante los últimos meses.
Las expectativas de que se adelante la subida de los costes de financiación indican una tendencia bajista del oro, pues el metal precioso lo tiene difícil a la hora de competir con otros activos rentables cuando suben los tipos de interés.