Nueva York, 27 jun (EFE).- El presidente del banco de la Reserva Federal de Nueva York, William Dudley, dijo hoy que el banco central estadounidense podría "continuar las compras de activos a mayor ritmo y durante más tiempo" si la economía no mejora en línea con lo previsto.
"Si las condiciones del mercado laboral y el crecimiento económico fueran menos favorables de lo previsto -y esto ha ocurrido en los últimos años-, preveo que las compras de activos podrían continuar a mayor ritmo y durante más tiempo", dijo Dudley durante un discurso en Nueva York.
Desde la semana pasada los mercados han vivido una gran volatilidad después de que el presidente de la Fed, Ben Bernanke, anunciara que las compras de bonos por valor de 85.000 millones de dólares mensuales podrían reducirse a finales de año y terminar completamente a mediados del que viene.
Pero Dudley enfatizó que ese calendario solamente se llevaría a cabo si "los datos macroeconómicos durante el próximo año resultan estar mayormente en línea con los pronósticos" del banco central, y recordó que "las circunstancias económicas podrían discrepar significativamente de las expectativas".
Dudley, que ocupa el puesto de vicepresidente del Comité del Mercado Abierto de la Reserva Federal, encargado de las políticas monetarias, añadió que si se modera la cantidad de compras de bonos esto supondrá todavía una política monetaria expansiva y no restrictiva.
Por otro lado, el presidente del banco de la Fed de Nueva York añadió que, incluso si las condiciones económicas alcanzan las expectativas, "es muy probable que esté muy lejos una subida de los tipos de interés", y añadió que el miedo de los mercados a un alza de los tipos "no está sincronizado" con lo dicho por la Fed.
Dudley aseguró que espera que la economía estadounidense crezca este año "en línea con las tasas registradas desde el final de la recesión", de alrededor del 2,1 %, pero "hay argumentos sólidos para creer que el ritmo de crecimiento se acelerará de forma notable en 2014".
En todo caso, el economista dijo ver en la economía estadounidense un continuo "forcejeo entre el lastre fiscal y la mejora subyacente de los fundamentos, con una gran incertidumbre sobre qué fuerza prevalecerá en el corto plazo". EFE