Investing.com - Los precios del oro se han mantenido prácticamente inalterados este lunes en Asia pues los inversores aguardan más noticias sobre las negociaciones comerciales en busca de indicios sobre una posible resolución de la disputa de Estados Unidos y China.
Los futuros del oro de la división Comex de la Bolsa de Nueva York se sitúan en 1.281,65 dólares, dejándose un 0,07%. El metal precioso registró la semana pasada su primera caída semanal desde mediados de diciembre, pues las acciones y el dólar se vieron impulsados ya que los inversores hablan de asumir más riesgo ante las crecientes esperanzas de una resolución de la guerra comercial entre China y Estados Unidos.
Según un informe del viernes, el secretario del Tesoro estadounidense Steven Mnuchin estaba considerando levantar algunos aranceles impuestos sobre las importaciones chinas.
Las acciones mundiales subieron tras esta noticia, incluso después de ser desmentido más tarde por el presidente Donald Trump, que añadió que ha habido progresos hacia un acuerdo comercial con China.
"Las cosas van muy bien con China y con la cuestión del comercio", dijo el sábado a la prensa en la Casa Blanca. El viceprimer ministro de China Liu visitará Estados Unidos el 30 y 31 de enero para una nueva ronda de negociaciones comerciales.
Mientras tanto, las preocupaciones en torno al impacto económico del cierre del Gobierno de Estados Unidos y la incertidumbre del Brexit también serán centro de todas las miradas.
El actual cierre del Gobierno continúa retrasando la publicación de algunos informes económicos clave de Estados Unidos, pero los inversores recibirán una actualización de las ventas de vivienda construida y solicitudes de subsidio por desempleo de Estados Unidos esta semana.
Los mercados de Estados Unidos permanecerán cerrados este lunes con motivo de una festividad nacional.
En el Reino Unido, la primera ministra británica Theresa May revelará su "Plan B" de Brexit en el transcurso de esta jornada.
El Reino Unido abandonara la Unión Europea el 29 de marzo sin un acuerdo a menos que los miembros del Parlamento presenten un plan alternativo con el que Bruselas también quede satisfecho.